Es difícil saber cuáles son los riesgos de que un feto no llegue a término, y más cuando se habla de bebés con más de 20 semanas de gestación. Uno de los factores que se buscan y tratan de controlar es el tamaño del bebé, por si hubiera un crecimiento intrauterino retardado (CIR). Un nuevo estudio, sin embargo, ha encontrado que el riesgo de muerte fetal no existe solo cuando el feto es demasiado pequeño, sino también cuando es demasiado grande.
Investigadores de EE.UU. analizaron todos los casos de muerte fetal ocurridos en 59 hospitales de 5 regiones en un término de 2 años y medio y vieron que el tamaño del bebé era muy importante a la hora de prever una posible muerte fetal, ya que se asociaba con entre un 25 y un 50% de los casos.
Según el estudio, los bebés que eran pequeños para el tiempo de gestación tenían entre 3 y 4 veces más riesgo de no llegar a término que los que tenían un peso dentro de la normalidad. Si el feto tenía un tamaño demasiado grande, el riesgo también era mayor.
Establecieron como niños pequeños aquellos que quedaban en un percentil menor a 10 en la tabla de crecimiento fetal y como niños grandes los que quedaban por encima del percentil 90. El mayor riesgo sucedía cuando los pequeños estaban por debajo del percentil 5 y cuando los grandes quedaban por encima del 95.
Esto sorprende un poco porque mucha gente suele asociar un peso elevado con un mejor estado de salud en el bebé, por aquello de unir tamaño con fuerza y vigorosidad. Sin embargo, como vieron los investigadores, no solo los más pequeños están en riesgo, sino también los grandes, y cuanto más grandes, peor.
El estudio puede leerse en la edición online de la revista PLoS Medicine y tiene como intención establecer unas nuevas normas a la hora de controlar los embarazos y crear estrategias de prevención, basadas en gran parte en controlar el tamaño del bebé, por pequeño o por grande. Esto no hará que se identifiquen a todos los fetos que no llegarán a término, porque hay muchas más razones por las que un feto no llega a nacer, pero sí se logrará, según dicen los investigadores, identificar a cerca del 46% de ellos.
La duda que me queda es cómo actuarán con los datos, una vez se sepa que existe el riesgo. Cuando se observa que un bebé está creciendo poco a la madre se le recomienda reposo, se hacen cambios en la dieta y se buscan las razones por si hay algo que se pueda tratar. Pero si encuentran que un bebé es grande, no sé qué pueden hacer para frenar el crecimiento. Imagino que, de igual modo, el objetivo será encontrar una posible causa y, sopesando riesgos y beneficios, tratar a la madre para evitar que siga creciendo tanto, si es que el tratamiento es posible.
Vía | Medline Plus, PLoS Medicine En Bebés y más | Factores que influyen en el crecimiento fetal, Calendario para conocer las medidas y peso del feto durante la gestación, El crecimiento del bebé en el vientre materno