Su uso aumenta en el mundo en toda la población y las embarazadas también se ven afectadas. No solo es importante la salud física de la futura madre, también la salud emocional es primordial y en este caso más todavía, ya que los antidepresivos durante el embarazo duplican el riesgo de defectos de nacimiento en el bebé.
Uno de los primeros consejos para evitar los defectos congénitos es hacer un uso racional de los medicamentos y evitar la automedicación: muchos fármacos son peligrosos para el feto. El uso de ciertos antidepresivos ya estaba bajo sospecha y un nuevo estudio viene a confirmar los riesgos.
Una de cada cuatro embarazadas sufrirá depresión o ansiedad y para algunas de ellas el problema vendrá de antes, por lo que si estaban tomando medicamentos antidepresivos han de consultar al ginecólogo antes de buscar el embarazo. Por supuesto, también una vez se quede embarazada.
En un informe reciente, realizado por investigadores de la Universidad de Monreal, se ha encontrado que la depresión puede ser tan mala para la salud del corazón como la obesidad o el tabaquismo. Además, las mujeres embarazadas que toman ciertos fármacos antidepresivos durante las primeras 12 semanas de su embarazo, el momento más delicado en la formación del bebé, son más propensas a tener hijos con defectos de nacimiento.
El equipo llegó a sus conclusiones después de analizar los datos de más de 18.000 mujeres deprimidas de la Cohorte de Embarazo de Quebec, que registró 289.688 embarazos entre 1998 y 2009. Encontraron que 3.640 de las mujeres (alrededor del 20%) tomaron antidepresivos durante los primeros tres meses de su embarazo.
Los resultados mostraron que entre el 6% y el 10% de las mujeres que tomaron antidepresivos durante este periodo tuvieron complicaciones con defectos de nacimiento, alrededor del doble de la tasa en comparación con las mujeres que no tomaron los medicamentos. Los investigadores creen que las drogas que interfieren con la ingesta de serotonina del feto pueden causar una amplia variedad de malformaciones.
En concreto, al examinar los tipos específicos de antidepresivos utilizados durante el primer trimestre, se encontró que el antidepresivo citalopram (que interfiere en la producción de serotonina) mostró un mayor aumento del riesgo de malformaciones congénitas, aunque todos los antidepresivos analizados mostraron cierto aumento del riesgo.
Este año 2017 oiremos hablar de la depresión más de lo habitual, ya que el Día Mundial de la Salud está dedicado a este complejo trastorno, que afecta a muchas personas, debilitándolas y en muchos casos haciéndolas dependientes de la medicación para mejorar su calidad de vida. Pero lo que cada vez está más claro es que se ha de buscar alternativas a los fármacos en el caso del embarazo, y más cuando, según señalan los profesionales de la salud, la efectividad de ese tratamiento con drogas no suele resultar efectivo.
Es complicado diagnosticar la depresión y también lo es encontrar una alternativa para la futura madre que no ponga en riesgo la salud del bebé, pero se hace necesario sopesar los riesgos y beneficios en cuanto a los fármacos antidepresivos en el embarazo. Cuidar la salud mental es importante para cualquier persona y en cualquier momento, pero sin duda en esta etapa de la vida hay una razón más de peso.
Foto | iStock
Vía | Consumer Affairs
Más información | BMJ Open
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