Poco se habla de la importancia de dormir bien y no solo en términos de horas de sueño (cuyo saldo muchos tenemos en rojo), sino también en cuanto a calidad. Todo aquello que aporta una buena rutina previa, un buen colchón y una buena postura, redunda en beneficios para nuestra salud.
Seguramente en este último punto la gran mayoría cometemos errores cuyas consecuencias notamos a diario, pero que no solemos relacionar con las horas que pasamos tumbados durante la noche, como el dolor de espalda o molestias en las cervicales. Sin embargo hemos descubierto un truco para "corregirlos" y mantener una postura correcta durante toda la noche.
El truco definitivo para dormir con una postura perfecta
Este truco que reveló James Leinhardt, un experto en postura del sueño (y del cual el embarazo me dio pistas muy certeras), es tan sencillo como efectivo: se trata de, durmiendo de lado, colocar una almohada entre las piernas, a la altura de las rodillas a la hora de dormir.
De esta forma tu cuerpo se alinea de forma neutral, brinda apoyo a la columna, equilibra el peso de las piernas y de la cadera, y además previene que el cuerpo cambie a una postura menos ergonómica mientras dormimos.
Levitex, la marca de sueño creada por James, se refiere a la posición lateral óptima semifetal como la "postura del soñador". También según el Instituto Europeo del sueño esta es la posición ideal para dormir, pero muchos de nosotros acabamos adoptando la posición de "aplaudir" (como en la imagen de la parte superior derecha). Esto sucede cuando la pierna superior se desliza hacia adelante, girando el cuerpo. La columna pierde apoyo, los puntos de presión cambian y el dolor puede comenzar a acumularse en los hombros y la espalda baja, cuestión que se agudiza en caso de que tengamos las caderas anchas.
El efecto que tiene la almohada de "frenar" el movimiento y que el cuerpo adopte otra postura, es también efectiva en caso de que durmamos boca abajo, aunque al principio cueste un poco más.
¿Y si dormimos boca arriba?
Dormir boca arriba no es del todo malo. Según el Instituto Europo del Sueño, "previene el dolor cervical y espalda, porque la columna descansa en posición recta y sin tanta tensión".
Sin embargo en este caso, el truco necesita una pequeña variación para optimizar nuestra postura: basta con colocar una almohada debajo de las rodillas. Esta ligera elevación ayuda a la alineación de la columna, además de ayudarle a mantener una buena posición durante toda la noche.
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