Cuando llegó al mundo con 26 semanas de gestación en el Hospital de Santiago de Compostela, era tan pequeño que no se atrevían a ponerle un nombre de más de cuatro letras. Lo llamaron "Javi". Tenía prácticamente el tamaño de un móvil, cabía en la palma de una mano. A sus padres Luis Miguel y Noemí, les dijeron que era muy probable que su primer hijo no sobreviviese a las primeras 72 horas de vida.
Tras nacer, bajó de peso y se quedó en 360 gramos. Sin embargo, tras cuatro meses en una incubadora, el pequeño a quien finalmente decidieron llamar Abraham ("el padre de la fe"), ha cogido peso, ha salido adelante, y por fin se ha podido ir a casa con sus padres.
Nació con la bilirrubina muy alta, tuvo el hígado inflamado. "Me decían que había muchas complicaciones, que era muy pequeñito, que podía coger infecciones", cuenta la madre.
Abraham es el bebé prematuro más pequeño de España y, casi con total seguridad, del mundo.
— Noticias CMM (@CMM_noticias) December 2, 2024
Sólo hay documentados tres casos, todas niñas, nacidas con menos peso que él. Nació a las 26 semanas y, tras cuatro meses en la incubadora, se ha podido ir a casa con su familia. pic.twitter.com/bpH9wVN93O
Tuvo que superar momentos muy duros en la UCI y complicaciones de todo tipo como una operación por una hernia inguinal ya que "como era tan pequeñito ni siquiera le pudieron poner la pinza en el ombligo", cuenta la madre en El Faro de Vigo. "No le quedó ni una secuela, está perfectamente", señalan los dos.
Grandes prematuros o prematuros extremos
Uno de cada 10 bebés que nacen hoy en día en el mundo lo hace antes de tiempo, y dentro de ese gran número de bebés prematuros, hay unos cuantos que nacen demasiado pronto.
A estos bebés se los llama prematuros extremos o grandes prematuros, por llegar al mundo entre la semana 22 y 28, cuando un embarazo a término es aquel que cuenta con 40 semanas de gestación. Dentro de esta categoría se encuentran los "microprematuros" (nacidos antes de las 26 semanas de gestación y con pesos extremadamente bajos, generalmente menores a 500 gramos).
En las últimas dos décadas estos nacimientos han crecido un 200 por ciento y, gracias a los avances médicos, cada vez más niños salen adelante a pesar de llegar al mundo tan pronto.
El bebé prematuro con menor peso registrado hasta el momento en España es Melany, nacida en el Hospital Parc Taulí de Sabadell en abril de 2024. Pesó solo 450 gramos al nacer, con 22 semanas de gestación y pasó más de cuatro meses en cuidados intensivos.