Hace unos días en el post no a la petición de reforma de la Ley del Aborto, hablábamos sobre una singular petición realizada por diversas asociaciones abortistas para ampliar la posibilidad de interrumpir el embarazo hasta la semana 24 de un modo libre y gratuito. Nosotros mostrábamos nuestra opinión, siendo totalmente contraria y acorde a la de la Asociación Española de Pediatría que trataba esta actitud como un infanticidio.
Ahora sabemos que sólo en Cataluña, el pasado año creció el número de abortos nada menos que casi un 20% con respecto al año 2005 y habrá que esperar a las cifras de este año para saber cuánto ha aumentado esta vez. El departamento de salud catalán indica que se practicaron casi 22.000 abortos, curiosamente la mitad de las mujeres que abortaron habían acudido un par de años antes a un centro de planificación familiar donde se informaron sobre el uso y los métodos de contracepción, este dato parece indicar que esta información, o no se asimiló adecuadamente, o los profesionales de la salud no supieron transmitirla. La mayoría de estos abortos, casi su totalidad, se realizaron en centros privados, sólo 606 se practicaron en los centros públicos de salud. Después de conocer diversas noticias sobre las prácticas indebidas de algunos de estos centros con respecto al aborto, nos da la impresión de que estas cifras podrían variar, no siendo del todo reales en cuanto al término de las gestaciones.
Son demasiadas interrupciones que no casan en absoluto con la mentalidad de potenciar la natalidad, la situación económica, la falta de concilio laboral o el temor, son causas que los organismos gubernamentales podrían limar, seguramente se reduciría la tasa abortista. No sólo es necesario proporcionar una ayuda económica por nacimiento, es necesario cambiar las leyes para que las mujeres trabajadoras puedan tener con toda tranquilidad un hijo, es necesario que se ayude a largo plazo a nivel económico (no es necesario dar dinero), basta con la reducción del precio de los artículos relacionados con el bebé o la subvención de guarderías y colegios.
Es necesario mayor protagonismo por parte de los organismos de planificación familiar, educar, concienciar y ayudar a todas aquellas mujeres que lo solicitan. Si se aceptara la modificación de la Ley del Aborto y no se solventan las cuestiones que hemos mencionado, seguramente las cifras se dispararán.
Vía | El periódico En Bebés y más | No a la petición de reforma de la Ley del Aborto