Desde mi punto de vista es una conclusión un tanto tirada de los pelos, o digámoslo de otra forma, demasiado relativa.
De cualquier modo, no es el primer estudio que relaciona el tamaño del bebé al nacer con la salud mental en la edad adulta. Al parecer, el tamaño con el que nacemos puede influenciarnos más de lo que creemos.
El mes pasado Elda nos hablaba de un estudio que afirma que los bebés pequeños al nacer son más proclives a sufrir depresión o ansiedad en la adultez.
Ahora uno nuevo, realizado por investigadores suecos y publicado en Journal of Epidemiology and Community Health, revela que los patrones de crecimiento en la edad fetal podrían influir en cierta manera en el comportamiento suicida al convertirse en personas adultas.
Según los resultados, los bebés de talla corta (menos de 47 cm de largo) fueron más propensos al suicido, tanto violento como no violento, independientemente de la altura alcanzada como adultos.
A su vez, corren más del doble de riesgo de suicidarse de forma violenta en comparación con otros bebés nacidos con una estatura adecuada. Esto podría convertirse en preocupante dado el aumento de nacimientos de bebés prematuros, y por ende de baja talla y peso.
La explicación podría estar en la serotonina, un neurotransmisor central con un papel muy importante en el humor, la ansiedad, las funciones cognitivas, etc. Al nacer prematuramente estos niveles son más bajos de lo normal lo cual podría potenciar la agresión, la depresión, e incluso comportamientos suicidas.
Hablar de estas cosas es horroroso, y como dije al comienzo bastante absurdo. Este tipo de estudios son estadísiticos y no prentendemos de ninguna forma alarmar a los papás al divulgarlos.
Sin embargo, por encontrarle algún sentido a lo que afirman este tipo de estudios, significaría que aunque las circunstancias personales vividas por un ser humano serían el desencadenante de una situación tan límite como quitarse la propia vida, esta carencia o “falla” que presentan los bebés pequeños también podría tener alguna relación con el suicidio.
Seguiremos el rumbo de las investigaciones científicas en este sentido a ver si arrojan datos más convincentes.
Vía | Infobae Más información | Journal of Epidemiology and Community Health En Bebés y más | Un estudio afirma que los bebés pequeños al nacer son más proclives a sufrir depresión en la adultez