Eso de que los bebés que nacen pequeños son siempre pequeños no sería cierto, según un estudio que señala que los niños que nacen pequeños para su edad gestacional, es decir de menor tamaño que aquellos con la misma cantidad de semanas de gestación, son más propensos a desarrollar adiposidad visceral (gordura) en el abdomen.
Han descubierto que estos niños suelen tener sobrepeso a la edad de 6 años y que aunque no lleguen a desarrollar obesidad y alcancen un índice de masa corporal normal para su edad tienen más grasa visceral que los pequeños de la misma edad nacidos con tamaño adecuado a la edad gestacional.
A diferencia de la grasa subcutánea, la visceral se forma entre los órganos internos, y concretamente la adiposidad visceral es la grasa acumulada alrededor de los órganos abdominales.
Podría deberse a que los niños pequeños al nacer sufren el denominado efecto de crecimiento rápido en la infancia.
También han encontrado que estos niños presentaban en su mayoría niveles muy altos de insulina como así de una hormona relacionada con el crecimiento y el desarrollo llamada IGF-1.
Hay que ser cautelosos con este tipo de estudios. No quiere decir que todos los niños que hayan nacidos pequeños vayan a desarrollar sobrepeso en la infancia, pero según lo que señala el estudio a lo mejor no es tan descabellado pensar que el creciente número de bebés con bajo peso al nacer podría estar relacionado con el aumento de obesidad infantil.
De todas formas, estaremos pendientes de nuevas investigaciones al respecto.
Vía | Buena Salud