Hacer una entrevista de trabajo puede resultar muy estresante, sobre todo si es la primera vez. Por eso es recomendable practicar previamente para estar bien preparados, y así enfrentarnos a ese momento de una forma más relajada y positiva.
Si estás dando tus primeros pasos en el mercado laboral o simplemente buscas un cambio, los expertos de Harvard han recopilado las diez preguntas más típicas que suelen hacerse en las entrevistas de trabajo, acompañadas de tácticas para responder que te ayudarán a destacar y a conseguir ese trabajo que tanto deseas.
1. ¿Podrías hablarme de ti y describir brevemente tu trayectoria?
Esta es una de las primeras preguntas que suelen hacerse en las entrevistas de trabajo, así que no desaproveches la ocasión de hablar sobre ti de forma que 'enganche' a tu entrevistador.
Los expertos de Harvard recomiendan que tu historia tenga un inicio impactante, un desarrollo cautivador y un desenlace que haga que el entrevistador te vea como el candidato ideal para el trabajo.
Asegúrate de mezclar en tu relato episodios significativos de tu trayectoria académica y profesional, con temas que te apasionan, proyectos originales en los que hayas trabajado, o desafíos a los que te hayas enfrentado.
2. ¿Cómo te enteraste de este puesto? ¿Estás buscando trabajo de manera activa?
Los empleadores van a querer saber cómo has llegado hasta ellos: si estás buscando empleo de forma activa, si su empresa te gusta por algún motivo especial, si alguien te ha recomendado para el puesto...
En este caso, desde Harvard aconsejan ser transparentes y aportar detalles significativos que llamen la atención de los entrevistadores.
Por ejemplo, si alguien te ha recomendado para el puesto, diles su nombre y el vínculo te une a esa persona. Asegúrate también de mencionar por qué la otra persona cree que eres el candidato ideal.
Si eres tú quien se ha interesado por la oferta de trabajo, explica qué te ha llamado la atención del puesto, y resalta aquellos valores personales que concuerden con los valores o la misión de la empresa. Recuerda también mostrar entusiasmo por todo lo que podrías llegar a aprender si comienzas a trabajar en la compañía.
3. ¿Cuál es el ambiente de trabajo que buscas?
Esta es una de esas preguntas que no es fácil responder sin caer en tópicos que quizá no te beneficien. Por eso, Harvard recomienda informarse previamente sobre la cultura de la empresa y su estructura organizativa, para que tu respuesta esté alineada. Y es que no es lo mismo trabajar para una empresa donde se valora la individualidad y la autonomía, que hacerlo para otra donde la estructura por equipos y el trabajo colaborativo son clave.
- Por ejemplo, podrías responder de esta forma: "Me gustan los ambientes de trabajo..., aunque realmente siento que prospero cuando...Realmente disfruto de ese equilibrio"
4. ¿Cómo llevas trabajar bajo presión?
Esta otra de las preguntas estrella que nunca falta en las entrevistas, pues la resiliencia y la capacidad de mantener la calma ante situaciones de alto estrés son habilidades muy apreciadas.
Para responder con éxito a esta pregunta, los expertos aconsejan compartir alguna experiencia laboral desafiante que hayas vivido a lo largo de tu carrera, lo que te hizo sentir y cómo conseguiste mantener la calma en aquellos momentos. Pero si afrontar de forma positiva los momentos de tensión no es tu punto fuerte, diles que eres muy consciente de su importancia y por eso estás trabajando día a día para desarrollar esta habilidad.
- Por ejemplo, comienza diciendo: "Siempre van a surgir situaciones estresantes y con cada experiencia se aprende algo nuevo. Recuerdo una ocasión, en la que...; lo que hice entonces fue...; me ayudó..."
5. ¿Prefieres trabajar de forma independiente o en equipo?
Esta pregunta está muy relacionada con la número 3, por lo que la respuesta debería basarse en las investigaciones previas que hayas realizado sobre la compañía. No obstante, desde Harvard advierten que en la mayoría de entornos laborales el trabajo en equipo suele estar presente.
Para dar una buena respuesta, resalta los mejores rasgos de tu personalidad a la hora de trabajar solo o en equipo, y destaca las ventajas y desventajas de ambas situaciones.
- Por ejemplo, podrías comenzar tu argumento diciendo: "Disfruto mucho combinando ambas formas de trabajar, porque..."
6. Si tuvieras que trabajar en varios proyectos, ¿cómo te organizarías?
En los últimos años ha ganado una especial relevancia el concepto "gestión del tiempo"; los empleadores buscan contratar a gente productiva, que sepa organizar su tiempo y energías de una manera eficiente.
La mejor forma de responder a esta pregunta es compartiendo tus hábitos diarios de organización, y ejemplificarlo con alguna situación en la que hayas tenido que trabajar en varios proyectos a la vez (cómo distribuiste tu tiempo, cómo te mantuviste organizado y concentrado, qué aspectos priorizaste...). Asegúrate siempre de enfatizar que cumples con los plazos.
- Por ejemplo, podrías contestar de esta forma: "En mi trabajo actual, estoy acostumbrado a tener entre manos varios proyectos a la vez. Para organizarme utilizo...lo que me ayuda a priorizar es..."
7. ¿Has mejorado tus conocimientos en el último año? ¿En qué te has formado recientemente?
No todas las personas pueden dedicar tiempo a formarse, tomar cursos o ampliar sus conocimientos para mejorar en algún aspecto del ámbito laboral. Si es tu caso, desde Harvard aconsejan destacar aquellos aspectos de tu vida personal en los que hayas trabajado últimamente, y que puedan ayudarte en tu trabajo.
- Por ejemplo, "Dedico mi tiempo libre a escribir. Siento que esta afición me acerca más a mí mismo y me ayuda a relajarme, y ha sido realmente excelente para mi salud mental y mi productividad"
Si por el contrario, has dedicado tiempo a perfeccionar tus habilidades profesionales, comenta qué has hecho, cómo te has formado, qué has leído últimamente que te ha ayudado...
8. ¿Cuáles son tus expectativas salariales?
Los empleadores siempre hacen esta pregunta en las entrevistas antes de seguir adelante con el proceso, con el fin de asegurar de que las expectativas de los candidatos se ajustan al presupuesto con el cuentan para el puesto.
Para estar en línea con el mercado, puedes preguntar a personas de confianza que trabajen en el mismo sector, o consultar páginas web que ofrezcan datos salariales actuales. También es importante que seas cauteloso y flexible, y en lugar de dar una cantidad específica propongas un rango salarial y dejes espacio para la negociación, teniendo en cuenta que es más fácil negociar hacia abajo, que hacia arriba.
- Por ejemplo, una forma elegante des responder sería: "Según mis habilidades y experiencia, estoy considerando un salario de entre... o de alrededor de..."
9. ¿Estás realizando más entrevistas de trabajo? ¿Estás en otros procesos de selección?
Esta pregunta estaría muy relacionada con la número 2 y la honestidad es clave a la hora de responder, aunque no es necesario dar todo tipo de detalles acerca de tus entrevistas o de los procesos de selección en los que estás inmerso.
- Por ejemplo, si estás en un proceso activo de búsqueda de empleo, puedes decir lo siguiente: "He realizado un par de entrevistas en otras empresas, pero este puesto me interesa especialmente porque..."
10. Veo que te has tomado un año sabático. ¿Cuál fue el motivo?
Para algunas empresas, las excedencias o años sabáticos tienen connotaciones negativas, al creer que el candidato podría no estar actualizado. Por eso es importante convencer al entrevistador de que tu año sabático te ha aportado valor, y te ha proporcionado conocimientos o experiencias muy útiles para el puesto.
- Por ejemplo, "mi año sabático me ha ayudado a adquirir habilidades nuevas en...; en este tiempo me he dado cuenta de que quería dedicarme a...; en este tiempo he hecho un curso sobre... que me ha permitido aprender sobre..."
Por último, desde Harvad aconsejan responder a las preguntas sin titubeos y con aplomo, y por supuesto, practicar previamente tus respuestas para llegar confiado a la entrevista, lo que te ayudará a posicionarte como el candidato ideal.
Foto de portada | Bebés y Más con DALL·E 3