La receta de esta semana no puede ser más saludable y es que vamos a preparar de cena para los pequeños gourmets de la casa: un lenguado a la naranja con arroz blanco sazonado.
En primer lugar, compramos filetes de lenguado fresco(nos los hace el pescadero). En cuanto lleguemos a casa, los lavamos bien y escurrimos, sazonamos los lenguados, con sal, los rebozamos con harina y los freímos por ambos lados, hasta que queden dorados, una vez hechos los apartamos.
En un cazo con agua, añadimos la piel rallada de una naranja, un poco de mantequilla y unas pocas almendras picadas. Lo ponemos a fuego altito sin olvidar de ir removiendo de vez en cuando. Antes de que hierva, retiramos del fuego y añadimos por encima de los lenguados. Lo metemos todo en el horno a 200ºC durante diez minutos, los últimos cinco minutos con el gratinador para que se dore y listo para saborear.
Mientras está el pescado en el horno, nos ponemos a preparar el arroz blanco. En una cacerola ponemos el aceite de oliva y los dientes de ajo pelados y cortados en rodajas, los doramos sin que se quemen, echamos una hoja de laurel y una pastilla de caldo de carne.
Añadimos el arroz y removemos hasta que los granos de impregnen con el preparado, lo cubrimos de agua (dos tazas de agua por una de arroz) y a cocer, no esperéis a que se consuma el agua del todo, retirar el arroz antes para que no quede seco y repose 10 minutos.
Emplatamos el lenguado con su salsa y un poco de arroz y a chuparse los dedos.
El lenguado es un pescado blanco de muy bajo valor calórico, por lo que es fácil de asimilar y digerir. Destaca su contenido en proteínas de alto valor biológico y minerales como el sodio, el potasio, el fósforo, el magnesio y de vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B6, B12). La abundancia de vitamina B6, también conocida como piridoxina, hace que este alimento sea muy recomendable en casos de diabetes, depresión y asma ayudando a prevenir enfermedades cardíacas.
El arroz por su bajo contenido en grasas, es un alimento excelente para mantener una buena salud cardiovascular siempre y cuando no se le incorporen grasas al cocinarlo. Es pobre en minerales, especialmente en hierro, calcio y zinc y por ello resulta conveniente tomarlo en combinación con legumbres, verduras, carnes o pescados. Eso si, contiene apreciables cantidades de tiamina o vitamina B1, riboflavina o vitamina B2 y niacina o vitamina B3, así como fósforo y potasio.
En cuanto a las almendras tienen propiedades relajantes, es una fuente excelente para combatir las enfermedades del corazón y son un poderoso antioxidante para la piel.
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