La Navidad es sobre todo ilusión: de compartir, de vivir experiencias únicas, de tener mucho tiempo libre, de recibir algún que otro regalo, y de sentir una magia que por alguna razón se esconde durante el resto del año. Pero como cualquier experiencia gratificante, se disfruta más cuando se tiene en cuenta la seguridad de los niños.
¿Y quiénes somos los garantes de esa seguridad? Los adultos, claro… los padres, abuelos o tíos somos los que los llevamos a actos multitudinarios como la Cabalgata de los Reyes Magos, o los talleres en un Centro Comercial; también somos los que decidimos sobre la cantidad de azúcar que habrá en nuestras comidas, y son solo ejemplos. Desde la Asociación Nacional de Seguridad Infantil están ofreciendo (y los harán hasta el ocho de enero) una serie de informaciones relacionadas con la seguridad de los niños durante las vacaciones de invierno, y me ha gustado mucho el primer artículo que hace hincapié en las salidas, y en cómo garantizar que nuestros niños se diviertan, y nosotros estemos tranquilos.
Como parte del reto de conseguir unas Fiestas Seguras, los padres debemos atrevernos a ser niños de nuevo, por muchas razones, pero principalmente porque al interactuar con ellos, involucrarnos en las actividades e ilusionarnos, los seguimos de cerca, y tenemos oportunidad de reforzar la autoprotección. Se nos propone también imaginar Historias relacionadas con la Navidad para reforzar su cultura preventiva; ¿un ejemplo?, podemos trazar una línea imaginaria representando el espacio de seguridad para que nuestros peques no se salgan de él al ir a recoger los caramelos que los pajes de los Tres Reyes Magos tiran durante el recorrido de la Cabalgata.
Planificación de las actividades
Si lo hacemos en familia, los peques podrán aportar ideas y participar como uno más (que son), así despertaremos la curiosidad y el interés de todos por diferentes formas de entretenimientos. Además, participando juntos, descubriremos lo que más les gusta hacer a nuestros niños, y seguro que aprenderemos mucho.
Es importante planificar cada salida en concreto, y hacerlo localizando los recursos disponibles por si alguien se despista, incluyendo puntos de encuentro, pulseras identificativas, memorización de números de teléfono, etc. Los niños son responsabilidad de los padres, por ello, mientras se pueda es importante ir con ellos a cualquier acto.
Con estos consejos podemos disfrutar de una Navidad más segura, y podéis ampliarlos mediante las recomendaciones relativas a comidas, decoración y regalos que os realizamos aquí. Y por supuesto os invito a seguir los próximos artículos e infografías de la Seguridad Infantil en Navidad, Fin de Año, y Reyes.
Más información | Asociación Nacional de Seguridad Nacional, en Twitter En Peques y Más | Recomendaciones para la compra de juguetes 'seguros'