La revista Nature acaba de publicar un estudio titulado "Nacimiento de bajo peso, prematuro o ambos: ¿es relevante para el riesgo de hipertensión en la edad adulta?". Las conclusiones obtenidas por el equipo de investigadores de Estocolmo (Suecia) han sido en sentido diverso según se tratara de bebés prematuros o de bajo peso.
El bajo peso sí es un factor de riesgo para sufrir hipertensión en la edad adulta, según se desprende de un análisis de 250.000 registros de nacimiento en Suecia desde 1925 a 1949. Ello es debido al pobre crecimiento fetal: aquellos que nacieron pequeños respecto a su edad gestacional aumentaban hasta un 54% el riesgo de sufrir hipertensión.
Por el contrario, no hay relación entre la duración gestacional y la hipertensión en la edad adulta, ya que los nacidos prematuramente (pero con un peso adecuado a su edad gestacional) no presentaban mayor riesgo de tensión elevada.
Port tanto, las conclusiones son que, al menos para los nacidos en la primera mitad del siglo XX, aunque es de suponer que las condiciones no han cambiado en el presente, la asociación entre el bajo peso en el nacimiento y la hipertensión adulta se debe al pobre crecimiento fetal y no al nacimiento pretérmino.
En el estudio final fueron incluídos todos los sujetos nacidos con una duración gestacional por debajo de las 35 semanas y/o un peso de nacimiento de 2 kilos en las niñas o 2'100 kilos en los niños. En total, se analizaron 6.269 sujetos, y se consultaron sus diagnósticos de hipertensión del Registro de hispitales suecos desde 1987 a 2006.
Vía | Nature En Bebés y más | Los bebés que nacen con bajo peso y en la infancia son obesos, tienen mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares