Cuando una familia se separa, es una experiencia muy amarga. No importa si la separación fue en términos amigables o si no tienen ganas de volver a verse nunca, a fin de cuentas, una de las cosas más tristes es ver cómo una familia se desintegra.
Pero cuando pasamos por este proceso hay algo que debemos tener muy claro: lo más importante en cualquier separación son los hijos. Y esto es algo que tiene muy claro unos padres separados, pues para ellos a pesar de haberse divorciado siempre serán una familia.
Desde 2013, Victoria Baldwin y Adam Dyson de Estados Unidos, se han tomado una foto familiar juntos. La primera de ellas fue cuando se encontraban esperando a su bebé Bruce y Victoria estaba en la última semana de embarazo. Desde entonces ellos decidieron comenzar una tradición: tomarse una foto familiar cada año.
Un par de años después en 2015, Victoria y Adam se divorciaron y tomaron caminos separados. Pero una tradición se mantuvo: su foto familiar anual. Ella envió su historia a la página de Love What Matters en Facebook en la que cuenta por qué a pesar de haberse divorciado continúan respetando esta tradición familiar.
"Las dos fotos de arriba fueron tomadas cuando Adam y yo estábamos casados. Las dos de abajo, fueron tomadas casi un año después y luego dos años después de que nuestro divorcio había finalizado. No estamos enamorados, no siempre estamos de acuerdo, no somos mejores amigos, incluso a veces no nos caemos bien. ¿Pero saben lo que sí somos? Somos una pareja que estará por siempre conectada por nuestro hermoso, inteligente, amable, compasivo y gracioso hijo. Nos RESPETAMOS el uno al otro. Nos recordamos que ninguno de nuestros roles como padres toma prioridad sobre el otro - ninguno de nosotros es más importante que el otro en la vida de nuestro hijo. Los DOS necesitamos estar ahí, los DOS necesitamos tiempo de calidad y crear memorias con él. Ninguno de los dos culpamos al otro por el camino que nuestra relación tomó. No nos echamos la culpa el uno al otro, y ciertamente no nos echamos la culpa en presencia de nuestro hijo.
Adam y yo no somo padres perfectos, pero hicimos un trato cuando nos divorciamos, poner a nuestro hijo primero y valorar la riqueza que cada uno trae a su vida, por diferentes razones. Así que sí, seguimos haciéndonos una foto familiar, y todavía pago una buena cantidad de dinero para tener las imágenes impresas y enmarcadas en la habitación de nuestro hijo. Él quizás no crezca con padres que viven en la misma casa... pero el crecerá viendo respeto, amabilidad, empatía, compasión, perseverancia, flexibilidad e incluso sacrificio, modelados por sus dos padres y el sabrá que es posible dejar de estar enamorados, pero nunca separados."
Actualmente Victoria y Adam viven en extremos distintos del país, ella en Alaska y él en Carolina del Sur, y aunque no es fácil organizarse para tomar una foto familiar, continúan haciendo el esfuerzo para hacerlo cada 12 o 18 meses. Han aprovechado cuando Victoria va a dejar a Bruce para pasar alguna temporada con su papá y viceversa, además que constantemente están en comunicación, compartiendo y hablando entre ellos de todo lo relacionado con su hijo.
Esta es sin duda una linda historia de cómo una pareja hace lo posible para que su separación no afecte a su hijo, pues a final de cuentas, aunque no continúen juntos siguen siendo padres. Desde luego uno nunca se casa pensando en que después se separarán, pero me parece que esta es una linda historia que nos recuerda y muestra que es posible criar juntos a pesar de estar separados.
Vía | Babble
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