Cada estación del año tiene algo especial para ser disfrutada, y el otoño no es un excepción.
Es una de las épocas del año más agradecidas, los días no son tan fríos y la naturaleza nos brinda un montón de experiencias para compartir con los niños, así que a no encerrarse y disfrutar del otoño con los peques. Todavía no ha llegado el frío del invierno, por lo que los días otoñales son ideales para dar paseos al aire libre, hacer excursiones al bosque, caminatas o montar en bici en plena naturaleza.
Una divertida actividad para hacer con los niños es recolectar frutos de otoño. Enséñales cómo son las castañas, cómo caen las bellotas, las piñas, las mil y un formas y colores de las hojas de los árboles….
Recolectad un poco de todo y llevadlo a casa para hacer manualidades durante el otoño. Si sois expertos en la materia, también podéis coger setas con los peques.
Otra ventaja del otoño es la lluvia. A los niños les encanta jugar bajo la lluvia, y siempre que estén bien preparados, ¿por qué no dejarles que disfruten de una experiencia tan divertida?
Bien abrigados, con chubasquero, paraguas y botas de lluvia ya están listos para ir a cantar bajo la lluvia y pisar charcos (como tanto le gusta a Peppa Pig).
No hace falta irse muy lejos para disfrutar del otoño con los peques. Buscad un monte cercano, un bosque o simplemente un parque urbano y disfrutaréis de buenos momentos en familia.
Foto | Chaquetadepollo. en Flickr