En algunos casos, más de lo quisiéramos, las cesáreas no son imprescindibles, pero en otros son el medio más eficaz para salvar la vida de un bebé por nacer.
Al detectarse sufrimiento fetal, por ejemplo, practicar una cesárea de emergencia es la forma más rápida de evitar daños irreversibles o de salvar la vida del bebé.
Las noticias hablan de una familia que no ha tenido la suerte de contar con una cesárea practicada a tiempo. El Hospital Sant Pau de Barcelona, donde ha nacido la hija de la pareja hace siete años, deberá pagar una indemnización por mala praxis médica al realizarle una cesárea tardía que le provocó a la niña serias deficiencias físicas psíquicas y sensoriales.
Según informó el Defensor del Paciente, la cesárea se le practicó a la madre bastante después de lo que se debería haber practicado, dado que la mujer sufría un cuadro hipertenso mal diagnosticado y mal tratado que provocó un desprendimiento de placenta y una falta de oxigenación al bebé. Es decir, una cadena de negligencias.
Al momento de realizar la cesárea el feto “se encontraba en situación de compromiso y pérdida de bienestar fetal" por culpa de la "imprudencia y mala praxis" al no haber controlado el estado vital del feto durante las dos horas y media previas a la cesárea. Cuando se la practicaron, ya se habían producido graves daños en la niña.
Realmente indigna enterarse de este tipo de casos, pero sin intención de asustar a ninguna de las embarazadas que leen nuestro blog, lo que pretendo es que estén informadas, que sepan que irresponsables hay en todos lados y que cuando se trata de la salud de nuestros hijos no hay dinero que pueda repararlo.
Ojala este tipo de historias sirvan de algo para que mejore la atención médica de la embarazada, que a veces parece que vamos a que nos hagan un favor más que ayudarnos a traer al mundo a nuestros hijos con toda la importancia que el hecho entraña.
Vía | La Vanguardia En Bebés y más | Un 20% de los partos son por cesárea en nuestro país En Bebés y más | El parto según tu constitución