¿Os ha pasado que vuestro/a hijo/a ya no quiere los cuentos que tiene en casa porque ya no le aportan nada nuevo? Pues no hace falta gastarse un dineral en libros siempre que pase esto porque no es difícil tener un cuentacuentos en casa.
Y es que, muchos de nosotros tenemos por nuestras venas sangre de cuentacuentos, pero cuando nos dice el pequeño que quiere un cuento, nos limitamos a leer aquellos que están desde hace tiempo en las estanterías de la casa. Esto no hace otra cosa que el entusiasmo y el interés vaya decayendo por parte del niño y por parte del adulto.
La razón de que esto ocurra es porque nos faltan recursos para poder crear nosotros historias nuevas para lograr llamar así la atención de nuestros hijos. Hoy vamos a ver qué cosas podemos hacer para elaborar nuestras propias historias.
¿Cómo crear un cuento?
A la hora de elaborar una historia infantil, podemos ayudaros de personajes tanto reales como ficticios. En ocasiones incluso pueden ser los propios niños quienes protagonicen nuestras aventuras imaginarias.
Estos protagonistas deberán tomar parte de situaciones comprensibles para los pequeños, las cuales pueden exagerarse sin tener ningún miedo (por ejemplo, que los animales hablen).
El final ha de ser el clásico, es decir, el típico final feliz donde el bien triunfa sobre el mal.
¿Cómo se desarrollará el cuento inventado?
Como hemos hablado recientemente, los cuentos tienen una estructura universal compuesta por introducción, nudo y desenlace. Esta es la estructura que usaremos para nuestra creación.
La introducción será donde presentaremos a los personajes de la historia (héroe y villano), los lugares y donde describiremos la situación a la que se tendrán que enfrentar. Podemos hacer referencia a temas reales o imaginarios.
Durante el nudo se desarrollará gran parte de la historia, y será aquí donde habrá un acontecimiento imprevisto, adecuadamente relacionado con los personajes de la historia.
Finalmente, en el desenlace, terminaremos nuestra historia recalcando que le bien puede con todo, que la justicia se acaba imponiendo y que todo vuelve a ser como era antes.
Consejos para crear una historia infantil
Teniendo en cuenta lo que acabamos de ver, es importante y aconsejable que a la hora de crear nuestro cuento infantil partamos de objetos, intereses o aciones cotidianas de aquellos quienes vayan a ser los oyentes de la historia.
Por ejemplo, si a nuestra hija le gusta mucho ir en autobús a ver a su abuela, podemos utilizarla a ella de heroína, el problema sería que el autobús se pierde, pero que finalmente nuestra hija ayuda al conductor del autobus (o al propio autobus si queremos que sea más mágico el relato) a llegar a su destino.
Además, no debemos olvidar que los cuentos pueden ser un recurso excelente para desarrollar destrezas, como son las destrezas comunicativas (verbales y no verbales). En especial en la etapa preescolar, donde el niño puede participar activamente en la narración por medio de preguntas, comentarios, gestos...
Existen algunas técnicas que nos ayudarán a conseguir tener un cuentacuentos en casa, y las veremos con más calma posteriormente.
Foto | Www.CournteyCarmody.com en Flickr En Bebés y más | Urbano, el robot cuentacuentos, "Érase una vez la LSE...": cuentos para niños sordos