Continuamos con cenas saludables y sabrosas para los peques, la idea de hoy es completa y nutritiva, ya que los peques van a comer verdura, hortaliza y huevo. Es una cena ligera, siempre que coman una porción, para que tengan una buena digestión.
Los ingredientes que necesitamos son: patatas, cebolla, tomates (hemos elegido la variedad cherry por su sabor), huevos, aceite y sal. La elaboración no tiene ningún secreto es rápida y sencilla. Pelamos las patatas y las lavamos bien, las cortamos muy finas para que se hagan pronto, después picamos la cebolla muy pequeña, le echamos la sal y probamos en crudo para que no quede salada.
En una sartén añadimos muy poco aceite y lo ponemos a fuego muy lento o bajo incorporamos la patata y la cebolla y movemos para que no se pegue ni se queme (aunque si el fuego esta bajo no se quema). Una vez que la patata y la cebolla esta tierna y blanda lo apartamos a una fuente escurriendo el aceite sobrante, si le hemos echado poco no será necesario.
Para pelar los tomates cherry ponemos agua a hervir y cuando lo haga lo retiramos del fuego y metemos en ella no más de 10 segundos los tomates cherry, los sacamos y los volvemos a meter en otro cacharro con agua fría para cortar la cocción los sacamos y ya los podemos pelar fácilmente, una vez pelados los picamos en cuadraditos pequeños y reservamos.
En una fuente ponemos los huevos y los batimos hasta que hagan espuma, así quedará esponjosa, le echamos la patata, la cebolla, los tomates y mezclamos bien.
En una sartén sin apenas aceite cuando esté bien caliente echamos todo y lo hacemos al punto para que no quede seca, emplatamos y listo para comer.
Si a los niños no les gusta el tomate de esta forma podemos hacerlos con un chorrito de aceite aparte para acompañar la tortilla.
Imagen | Marcos López