Cómo usar los inhaladores en niños sin que sea un drama

Cómo usar los inhaladores en niños sin que sea un drama
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Cada año se venden en las farmacias de España 16 millones de inhaladores. Sin embargo, se calcula que más de la mitad de los pacientes con problemas respiratorios que requiere de tratamiento con inhaladores, no los usa bien.

En el caso de los niños es más complicado, porque cuesta que se queden quietos para poder administrarles el medicamento que necesitan mediante inhaladores. Pero empecemos por el principio.

¿Qué es un inhalador? Es un dispositivo que contiene un medicamento atomizado en gotas diminutas y que al pulverizarlo en la boca, pasa directamente a las vías respiratorias. Así, el principio activo llega más fácilmente y de forma localizada a bronquios y pulmones, siendo más efectivo que otra vía de administración.

¿Para qué se utilizan? Para el tratamiento de enfermedades respiratorias de niños y adultos tales como el asma, la bronquiolitis, la neumonía o las crisis alérgicas. Será el médico quien lo prescriba cuando lo crea conveniente.

Inhaladores para niños, siempre con cámara

En el caso de los niños, no se debe aplicar el inhalador directamente, sino que se utiliza una cámara espaciadora con una mascarilla para una mejor aplicación. La cámara con mascarilla se coloca entre el inhalador y la boca del niño, haciendo que sea más fácil administrar el medicamento y por tanto su eficacia.

Entre los beneficios del uso de la cámara en niños, según la AEP:

  • Al quedar las partículas del aerosol en suspensión dentro de la cámara, pueden ser inhaladas sin que haga falta coordinar el disparo con la inspiración del niño.
  • La absorción es menor que por vía oral, por lo que dan menos efectos secundarios
  • Ralentiza la velocidad de salida del aerosol. Esto reduce el impacto del fármaco en boca y garganta. Así se evitan posibles efectos adversos como tos, afonía o candidiasis.
  • Favorecen el depósito pulmonar del medicamento. De esta forma es más efectivo.

Tipos de cámaras:

Las cámaras pueden ser de distintos tamaños y materiales (metálicas, de plástico). Las más utilizadas son las cámaras de plástico fabricadas con material antiestático para que las partículas del medicamento no queden pegadas a sus paredes y llegue mayor cantidad a los pulmones.

Lo normal en niños pequeños y lactantes es usar cámaras de pequeño volumen, de 150 a 200 cc. Hay que aplicarlas con la mascarilla más adecuada a la edad del niño. Hay mascarilla neonatal, infantil y para niños mayores que no sean capaces de inhalar a través de la boquilla de la cámara.

CSTLL Sandoz Bienestar - Aerochamber Cámara de Inhalación, Tamaño Mediano, para Niños de 1 a 5 Años, Blanco

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EasyChamber Dispositivo espaciador antiestático con máscara para niños, cámara de inhalación, uso con inhalador de dosis medida, sin BPA y sin látex

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¿Cuándo quitar la mascarilla de la cámara?

En Pediatría se recomienda siempre el uso de cámaras espaciadoras cuando se necesitan aerosoles inhalados.

- En lactantes y niños pequeños, los fármacos inhalados para el asma se administran con cámara espaciadora con mascarilla facial.

- Los niños a partir de los 3-4 años pueden inhalar directamente a través de la boquilla de la cámara (sin mascarilla facial).

Es muy importante que el niño esté tranquilo. Si llora, el depósito pulmonar es inferior que si se realiza la inhalación estando tranquilo.

Cómo usar el inhalador con niños, paso a paso

Para empezar, debemos procurar que el niño esté tranquilo. Si es un bebé pequeño, lo sentaremos en nuestro regazo. Podemos cantarle o ponerle unos dibujitos en la tele para asegurarnos que no se moverá demasiado.

  1. Abre el inhalador, agítalo y colócalo en el orificio de la cámara de manera vertical.
  2. Hay que asegurarse de colocar bien la mascarilla cubriendo boca y nariz para que quede sellada con la cara del niño y no se escape el medicamento.
  3. Hacemos una pulsación (un puf) en el inhalador.
  4. Sujetamos la cámara pegada a la cara del niño y contamos hasta 10 mientras el niño respira unas 5 veces. Podemos jugar a que el niño vaya contando con los dedos de las manos, tocándole cada dedo, o también podemos cantar una canción durante esos 10-15 segundos. Lo importante es que respire tranquilamente el aire de la cámara con la mascarilla pegada a la cara.
  5. Si hay darle otra pulsación, que suele ser el tratamiento habitual, esperaremos 60 segundos y repetimos la operación

Para que lo veáis de forma práctica, os dejamos un vídeo de la SEICAP (Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica) donde lo explican paso a paso.

No os olvidéis de limpiarla al menos una vez al mes con agua tibia jabonosa y dejando secar al aire, sin frotar. Si las válvulas no están en buen estado y no funcionan bien, habrá que cambiar la cámara. No compartir la cámara con otros niños.

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