Un bebé puede no tener conciencia de muchas cosas al principio de su andadura en la vida, pero su cerebro es mucho más capaz de lo que nos imaginamos (y de lo que hasta hace poco se pensaba) y muy pronto tiene conocimiento de él mismo. Pero, ¿cómo se percibe a sí mismo el bebé?
Según el doctor Daniel Stern, en la evolución de los "autosentimientos" del bebé existen cuatro fases que se superponen, que van desde los dos meses a más allá de los 18 meses, cuando el niño desarrolla su capacidad lingüística.
En los dos primeros meses existe el sentimiento de "un sí mismo emergente", una fase en la que el bebé vive cada momento con todos sus sentidos, gracias a los cuales traduce y transforma todo su alrededor en sensaciones y reacciones corporales. Todavía no distingue entre lo exterior y lo interno, entre acontecimientos y sentimientos.
Entre los dos o tres y los seis meses aproximadamente se desarrolla lo que Daniel Stern denomina "el sí mismo nuclear", en el que el bebé percibe que tiene sus propios sentimientos y su propia voluntad. La aparición de la sonrisa social (no el reflejo primario de la sonrisa angelical del recién nacido) coincide con esta fase.
Entre los siete y los nueve meses el bebé gracias a su rápida evolución desarrolla el sentimiento de "un sí mismo subjetivo", que aporta una perspectiva diferente. A la simple observación de acciones se suma el descubrimiento de sentimientos, de relación causa-efecto... Ahora son posibles las interacciones más conscientes entre él y los demás, sobre todo con la madre o su figura principal de referencia.
Hasta el año y medio aproximadamente el niño no desarrolla el sentimiento de "un sí mismo verbal", que le ayuda a establecer la facultad de la autoobservación y al mismo tiempo de la objetividad.
Es es este último periodo cuando se produce "el estadio del espejo" (según la teoría del psicoanalista francés Jacques Lacan), una fase del desarrollo psicológico del niño comprendida aproximadamente entre los seis y los dieciocho meses de edad y que indica una superación en la fase de no reconocimiento. En este momento, el niño reconoce su imagen corporal completa en el espejo.
Daniel Stern, autor de las cuatro fases de la autopercepción del bebé, es profesor honorario de Psicología de la Universidad de Ginebra, profesor adjunto del departamento de Psiquiatría de la Escuela de Medicina de la Universidad de Cornell y Doctor Honoris Causa por las Universidades de Copenhague y Alborg (Dinamarca); Palermo y Padua (Italia); y Mons Hinault (Bélgica).
Autor de obras como "El nacimiento de una madre", "Diario de un bebé" o ·"El nacimiento de una madre", está interesado por el mundo psicosocial de los bebés y la maternidad. En algunas de sus obras habla de cómo se percibe a sí mismo el bebé, una interesante teoría que hemos querido compartir para conocer mejor a nuestros bebés.
Foto | Nora Mah Flickr-CC En Bebés y más | Cómo amplían nuestros hijos su círculo de afectos, Punset: Cinco consejos para hacer de un bebé un adulto capaz y feliz, El vínculo entre padres e hijos es clave para la autoestima