Cómo elegir la mejor trona para tu bebé
La trona es uno de los muebles en los que más tiempo solemos invertir sopesando todas sus características para elegir la que más se ajusta a nuestras necesidades. Sin embargo, es tan grande la oferta y tan diversos los diseños, que es vital tener en cuenta estos puntos fundamentales (más allá de su aspecto), para que el niño pueda alimentarse de una forma cómoda y segura.
El niño debe sentarse a un ángulo de 90º, es decir, sin reclinarse
El niño nunca debe reclinarse a la hora de comer porque aumenta la posibilidad de atragantarse, especialmente cuando son muy pequeños y pueden quedar pequeños trozos en la boca que pueden obstruir las vías cuando les tumbamos hacia atrás. Por defecto no debería poder cambiarse el ángulo de la trona.
La mesa o la bandeja, debe quedar a la altura de sus codos
La comodidad del niño es un aspecto fundamental para que pueda ir ganando autonomía a la hora de comer (especialmente si vais a practicar el Baby Led Weaning). Por eso debe poder apoyar los codos en la mesa o en la bandeja que tenga incorporada, ya que de esta forma podrá manipular los alimentos sin problema.
Debe ser estable
Una de las características más importantes de una trona es su estabilidad: es decir, no debe poder desmontarse, inclinarse con los movimientos del niño, o irse hacia atrás en caso de que se impulse a partir de la mesa u otro objeto cercano.
Debe tener reposapies
Tener los pies apoyados les brinda estabilidad y seguridad a los niños, así que es muy recomendable que la trona posea esta pieza.
Debe ser cómoda para el bebé
¿Habéis notado lo incómodo que es comer cuando nos sentamos en una silla de plástico sin más? Pues a los bebés les pasa lo mismo, así que elige una que tenga acolchados tanto el respaldo como el asiento.
Debe tener un sistema de retención
Otro punto importantísimo a tener en cuenta es que el bebé debe estar seguro en todo momento: por eso la trona debe tener un sistema de retención como un arnés o barra que impidan que el bebé se resbale por la parte inferior o que se pueda poner de pie.
Debe ser fácil de limpiar
La trona es uno de los muebles que necesitan limpieza permanente, así que es indispendable que se pueda hacer con facilidad.
Otras funcionalidades
Hay otras funcionalidades que, aunque no son indispensables, sí que pueden facilitarnos un poco del momento de alimentar al bebé. Algunas de ellas pueden ser tener ruedas para poder transportarla de un lado a otro, tener alguna cesta para dejar las toallas y los juguetes, tener bandeja extraíble, que sea plegable, compacta, evolutiva o poder ponerla a diferentes alturas. Es importante tener en cuenta que no todas tienen todo, así que una buena idea es hacer una lista de nuestras condiciones imprescindibles, antes de decidirnos por una.
En mi caso, por ejemplo, de todos esos "plus", yo no quería que tuviese bandeja sino que pudiese juntarse a la mesa para que mi hija se integrase a la hora de comer con el resto de la familia. Tampoco quería ruedas porque prefería que no pudiese moverse de su sitio. La que reunió todas las condiciones fue la Tripp-Trapp de Stokke, y sigo convencida de que fue la mejor opción que pude haber elegido.
Imagen | freepik, Stokke, senivpetro