Los adornos del árbol de Navidad no tienen por qué ser siempre las bolas tradicionales. Si este año quieres darle un toque diferente puedes colgarle adornos comestibles o bien, una idea entrañable es la de decorarlo con fotos familiares.
Podéis utilizar fotos de los peques desde que eran bebés y fotografías antiguas de toda la familia. A los niños les encantará descubrir cómo eran mamá y papá de bebés o cuando eran pequeños. Además, es una buena forma de recordar en estas fechas a quienes están lejos.
Es una actividad ideal para hacer con los hijos. Pueden colaborar en la elaboración de los adornos-foto a la vez que compartir con ellos recuerdos familiares del pasado.
La forma de hacerlo es muy fácil. Primero, hay que ponerse a buscar fotos viejas. Para no estropearlas es mejor escanearlas, luego imprimirlas y pegarlas sobre un trozo de cartón. Les hacemos un agujerito y pasamos un hilo o cordón fino para colgarlas.
Echándole un poco de imaginación podemos recortar las fotos de diferentes formas: redondas, rectangulares, estrellas, o recortarlas con tijeras con formas, así como imprimir algunas en color y otras en blanco y negro. A lo mejor preferís un árbol con un estilo nostálgico; en ese caso quedarían estupendas todas las fotos en blanco y negro.
Vía | Decoesfera Foto | Sweet Paul