A menudo os traigo algunas ideas decorativas que pueden resultar interesantes para las casas con niños. Una que me ha encantado es la de crear un mural con fotos del bebé.
Es una propuesta orginial, bonita y lo más importante, sencilla de realizar. Las fotos deben ser todas del mismo tamaño y hay que disponerlas de forma tal que compongan una cuadrícula.
Dependiendo del espacio disponible en la pared podremos elegir colocarlas de forma horizontal, vertical, más largo que ancho, más ancho que largo, etc.
La clave para que nos quede una composición atractiva está en la elección de las fotos. Si miráis bien todas tienen una armonía cromática en tonos rosados y grises. Esto puede ser un detalle de la foto original o bien pasarla por el retoque mágico del Photoshop.
A su vez, la gracia está en que las fotos del niño (o los niños si tenéis más hijos) están combinadas con imágenes en primer plano de objetos como una máquina de escribir, una calle o una taza. Si os apetece, podéis reemplazarlas por ejemplo por imágenes en detalle de los juguetes del niño.
Otra cosa que quedaría muy bien es combinarlas con fotos de las partes del cuerpo del bebé como una manita, un piececito o una pierna. Y que las fotos no tengan un encuadre y un enfoque perfecto, es decir, valen cabezas cortadas, planos desenfocados, etc. Para mayor inspiración, podéis acudir a los consejos de nuestros amigos de Xatakafoto.
En fin, os dejo con esas ideas. Sólo queda escoger un rincón especial de la casa para exponer un precioso mural con las fotos de tu bebé.
Vía | Kireii
Foto | Creature Comforts