Los estereotipos de género se adquieren a través de procesos de aprendizaje en los que intervienen además de factores culturales comunes a la sociedad donde vive el individuo, como los medios de comunicación, otros relacionados con el contexto más inmediato: la familia, escuela, los propios compañeros y amigos...
Los estereotipos son las creencias generalizadas sobre los atributos que caracterizan a determinado grupo social. Esas creencias sobre los géneros se han ido formando en épocas anteriores y son transmitidos por la sociedad sin apenas modificaciones a lo largo de las últimas décadas.
Una familia puede intentar no transmitir estereotipos, algunas incluso llegan al límite de no querer determinar la identidad sexual de su hijo en una especie de experimento, pero en cualquier caso siempre habrá factores externos que determinen que nuestros hijos se impregnen de esas características asociadas a los géneros en nuestra sociedad.
Lo que sí existe una diferenciación de género objetiva: hay hombres y mujeres, más o menos condicionados por su identidad y/o estereotipos. Pero esa diferencia nunca debería ser concebida peyorativamente.
A nuestras hijas les decimos que pueden jugar al fútbol. Yo misma puse a mi hija de tres años un fragmento de "Quiero ser como Beckham" para que viera a las chicas jugar, cuando me dijo que el fútbol era para niños. Dónde aprendió/escuchó eso, no lo sé (tal vez compañeros en el cole, tal vez porque el fútbol en TV siempre es de hombres...).
Lo que está claro es que tendremos que seguir mostrándoles que esto y aquello puede ser de chicas, de niñas, porque "es" de personas, no importa su género. Todas las niñas pueden ser como Beckham, pueden ser futbolistas, médicos, arquitectas, jugar con un camión o con unas herramientas.
Vía | Revista de Educación 327 En Bebés y más | Cuentos infantiles para la no discriminación, Educar a niños y niñas, ¿Vestir a los hermanos igual?