Con solo una mirada a nuestros hijos podemos darnos cuenta como su futuro será muy diferente al resto. Los avances de la tecnología y la facilidad con la que se han adaptado a ella nos da una imagen bastante clara del futuro más cercano.
Como no, la educación no va a ser algo que permanezca indiferente a estos cambios, tal como ya contamos en este artículo. Hoy vamos a profundizar en toda esa tecnología que acaba de surgir, el reconocimiento de gestos; tecnología en la que se basan las ya famosas tabletas y smartphones. Hoy veremos siete aspectos en los que la tecnología de reconocimiento de gestos va a revolucionar la educación.
Acaba de llegar a nuestros hogares, pero ya se ha hecho un hueco indispensable en muchos de ellos e incluso hay quien ya no concibe (o no se acuerda) de la vida antes de las pantallas táctiles.
Para mis hijos ya todo es táctil, hasta lo que no lo es. Es ver una pantalla y empezar a interactuar con lo que salga en ella (lo que hace que tenga un televisión con más huellas dactilares que la barra de un bar). Pero no puedo reprocharles nada, pues es algo natural el tocar aquello con lo que quieres jugar, mover, etc.
Incrementa el interés del estudiante
Un estudiante que está activo y participante es un estudiante que está atento a lo que hace. Hoy en día, las clases consisten en mantener al alumno sentado en su sitio, con esta tecnología el alumno puede moverse de un lado a otro e interactuar con el medio que le rodea.
Permite una formación muy especializada
Aprender sobre como realizar un trabajo es necesario, pero muchas veces necesitamos tocar, necesitamos pasar de la teoría a la práctica. Conducir maquinaria pesada, operar en ciertos entornos requiere crear costosos entornos de simulación que se abaratarían considerablemente con esta tecnología.
Entrar en un tour virtual
Muchas veces hemos visto en películas de ciencia ficción como en ocasiones el protagonista juega con una imagen tridimensional de aquello que quiere ver, tocándola y accediendo a espacios sin estar realmente ahí. Todo eso, será posible en un futuro cercano.
Falicitar el aprendizaje musical
Muchos estudios han demostrado el beneficio de la música en el aprendizaje y desde hace muchos años está incluida en los planes de estudios de multitud de países. Sin embargo, en muchos de ellos han tenido que restringir este aprendizaje debido al sobrecoste que implica la compra de instrumentos musicales. Esta tecnología permite baratar a una ínfima parte el coste de aprendizaje de esta asignatura.
Fomentar la confianza en un entorno seguro
Muchos entornos pueden ser intimidatorios e incluso peligrosos para los estudiantes, sin embargo practicar en este tipo de situaciones puede ser vital para el aprendizaje. La tecnología pone a nuestra disposición la emulación de estos entornos eliminando esa peligrosidad del entorno real.
Permite la interacción de varios usuario a la vez
En una clase convencional, la interacción entre alumno y profesor o entre alumno y la materia de estudio suele ser de uno a uno, haciendo que el resto de alumnos tenga que esperar su turno. Con este tipo de tecnología se habilita la interacción múltiple permitiendo que toda la clase pueda estar presente en la lección a la vez.
Hace que el aprendizaje sea divertido
Uno de los granes problemas con los que nos encontramos a la hora de enseñar es mantener el interés del alumno. No todos los profesores tienen la capacidad para, por decirlo de alguna forma, mantener a su público interesado en la explicación, pero mediante la interacción virtual se consigue tener entretenido por más tiempo al alumno, sobre todo a los más pequeños, más dados a explicaciones empíricas que teóricas.
Foto | Thinkstock
Vía | mentalfloss
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