La crianza de los niños tiene un impacto muy grande en su desarrollo posterior, hasta tal punto de que unos investigadores mostraron en 2012 los efectos del amor maternal sobre el cerebro (y demostraron que se podían producir cambios anatómicos); pertenecen a la Escuela de Medicina de Sant Louis (Universidad de Washington). Lo hicieron escaneando el cerebro de unos niños, y repitiendo las pruebas cuatro años después.
Las imágenes, revelaron que los cerebros de aquéllos que habían tenido una interacción positiva, cuyas madres eran pacientes, y mostraban su afecto frecuente y explícitamente, presentaban un aumento del hipocampo del 10 por ciento respecto a los que tenían poco contacto con sus madres o una relación menos afectuosa.
Las afirmaciones de este estudio sólo validan algo que podemos intuir: el amor maternal / paternal es un nutriente cerebral que puede contribuir a crear seres humanos adaptables
En un intento de explicar qué tiene que ver el hipocampo con el amor, y cómo desempeña sus funciones, diré que frente a las tensiones, el cerebro activa el sistema nervioso autónomo, que controla la liberación de hormonas del estrés. Como podéis suponer, estas hormonas ayudan aumentando la frecuencia cardíaca y ayudando al cuerpo a adaptarse. Vamos ahora con el hipocampo: es la principal estructura del cerebro que está implicada en esta respuesta adaptativa.
Pero sorprendentemente, esta respuesta también es clave en el aprendizaje y la memoria, por lo tanto, podría estar directamente relacionada con el rendimiento en la escuela.
Aunque el 95 por ciento de los padres cuyas habilidades de crianza fueron evaluadas durante el estudio eran madres biológicas, los investigadores dicen que los efectos de nutrir el cerebro tienen probabilidades podrían ser los mismos para cualquier cuidador principal, ya sean los padres, abuelos o los padres adoptivos.
Parafraseando a María José Garrido Mayo en Etnopediatría: ‘Un estilo de crianza basado en el cariño parece, a la luz de las investigaciones mostradas en este trabajo, favorecer el desarrollo emocional, cognitivo y cerebral en la infancia. El amor como modulador de los cambios anatómicos cerebrales…’
Imágenes | Gabriela Pinto, elise ramsey Vía | Etnopediatría Más información | Proceding of the National Academy of Sciences (USA) Más información | Estudio: Maternal support in early childhood predicts larger hippocampal volumes at school age En Peques y Más | Los estilos de crianza 'modernos' afectan negativamente al desarrollo del cerebro, Las demostraciones de afecto ayudarán a los niños a construir su autoestima: necesitan nuestro amor incondicional