La limpieza es una de las mayores preocupaciones en casa cuando tenemos niños pequeños. No se trata de convertir el hogar en una burbuja estéril ni mucho menos, ya que un poco de suciedad en los niños podría ser beneficiosa, pero sí de mantener hábitos de higiene necesarios para una vida diaria saludable.
Hablaremos de algunas claves para mantener la limpieza de la casa con niños y demostrar que no es una misión imposible.
Replantear rutinas
Cuando llegan los niños, mantener la limpieza en casa tal como lo hacíamos antes es muy difícil porque los demandan mucho de nuestro tiempo y porque, lógicamente, ensucian y desordenan. Por tanto, lo que debemos hacer es replantear las rutinas de limpieza en el hogar.
La clave está en organizarse y saber aprovechar el tiempo, como por ejemplo limpiar cuando el bebé duerme la siesta o cuando los niños van al cole.
Puedes confeccionar un calendario semanal de tareas. Un recurso que a mí me funciona bien, aunque hay que saber ser flexible porque con niños nunca se sabe, es crear un organigrama por zonas de la casa. Por ejemplo, lunes: baño, martes: salón, miércoles: habitaciones, etc.
Así, se hace un poquito cada día y se evita la paliza de limpieza un día del fin de semana. Por supuesto que si el suelo o el baño se ensucia, se limpia, aunque sea de un día para otro.
Precauciones de seguridad con niños pequeños
Algunos productos tóxicos como lejía, amoníaco, limpiadores de baño, de horno, desinfectantes desprenden vapores y gases nocivos, por tanto no deben ser utilizados en presencia de niños pequeños.
Por supuesto, los productos limpieza deben guardarse fuera del alcance de los niños, en sitios altos o cerrados con trabas que ellos no puedan abrir.
La intoxicación por productos tóxicos domésticos es la segunda causa más frecuente de intoxicaciones en la infancia, por tanto la seguridad a la hora de guardarlos es esencial, así como saber cómo actuar si por accidente el niño ingiere algún producto de limpieza.
Casa limpia pero no esterilizada
Cada vez estamos más acostumbrados a reclamos publicitarios como "desinfección total", "poder bactericida", y eso puede estar bien para un quirófano, pero no es necesario llegar a tales extremos en un hogar, basta con tener la casa aseada, controlando la suciedad y los focos de infección.
Los humanos hemos convivido siempre con bacterias, y en cierta medida, eso es lo que ha ayudado a crear un sistema inmunológico fuerte.
Los niños pueden ayudar a limpiar
Podemos involucrar a los niños en las tareas del hogar desde que son pequeños, pues es importante enseñarles a colaborar en los quehaceres, para que entiendan que no se trata sólo de "ayudar a mamá", sino que es cosa de todos.
Al principio lo tomarán como un juego, pero poco a poco podemos explicarles cómo se hacen, con paciencia y confiando en que lo harán bien. Desde pasar una bayeta hasta aspirar el suelo, asignando tareas cada vez con más responsabilidad, de acuerdo a su edad y posibilidades.
Familiarizarlos con las tareas domésticas es algo que les ayudará para el resto de su vida, además de hacerlos sentirse partícipes y útiles como miembro de la familia.
Seguir estos consejos os ayudará a que la limpieza de la casa con niños no se convierta en una misión imposible, sino en una tarea que, aunque a veces algo ingrata, es un gesto necesario para cuidar la salud de tu familia.
En Bebés y más | Enseñarles a los niños a colaborar en las tareas del hogar, ¿Pasan la aspiradora vuestros hijos? Fotos | GlennB y bellafia en Flickr