Un estudio se ha encargado de medir la contaminación que se genera dentro de un coche cuando una persona fuma y se registraron niveles tres veces más altos al límite recomendado por la OMS (Organización Mundial de la Salud).
A la vista de estas mediciones debería prohibirse fumar en el coche cuando hay niños, ya que son especialmente susceptibles al humo del tabaco. Exponerlos a tal nivel de contaminación en un espacio cerrado es, al menos, irresponsable, ¿no lo crees?.
Ya se prohíbe fumar en parques infantiles y en sitios públicos como bares, restaurantes, en los que los niños quedaban irremediablemente expuestos al humo, pero ¿qué pasa con los espacios privados como los coches particulares o las casas?
Los niños que viajan en los asientos traseros del coche reciben las sustancias tóxicas que les llegan directamente del fumador. Aunque se abran las ventanas o se encienda el aire acondicionado, tienen un ritmo de respiración más rápido que el que tenemos los adultos y un sistema inmunológico menos desarrollado que los hace incapaces de evitar la exposición al humo de segunda mano.
La Asociación Médica Británica opina que se debería prohibirse fumar en los coches cuando hay niños, pero al ser un espacio privado, es muy difícil de controlar.
Ya se prohíbe hablar por el móvil, así que con campañas de concienciación se debería advertir a los padres el perjuicio que supone fumar en el coche para la salud de sus hijos, descontando además que encender un cigarrillo también supone una importante distracción que pone en riesgo la integridad de los ocupantes del vehículo.
Vosotros, ¿estáis de acuerdo con que se prohíba fumar en el coche cuando hay niños?
Foto | kyle hovey en Flickr
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