Errores que con el segundo bebé no volvemos a cometer

Errores que con el segundo bebé no volvemos a cometer
2 comentarios

Aunque el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, cuando tenemos un segundo hijo procuramos (sólo he dicho, procuramos) aprender de los errores que hemos cometido como papás primerizos.

La falta de experiencia con el primer bebé nos lleva a hacer ciertas cosas que no volveríamos a repetir y otras que quisiéramos volver a vivir mil veces. De momento, vamos a centrarnos en las que no repetiríamos.

Con el segundo ya conocemos un montón de cosas que antes no sabíamos, tenemos mejor mano y estamos más organizados. Tenemos más práctica, tanto cuando se trata de cuidados como de la crianza y hemos conseguido desarrollar un sexto sentido, el sentido común de los padres.

Ni hablar de los papás que han sido padres tres o más veces. Seguro que cada vez lo hacen mejor.

Basándome en mi propia experiencia como madre de dos, los errores que generalmente los padres reincidentes no volvemos a cometer son:

  1. No vivimos el embarazo con tanta angustia: después del primero aprendemos a no preocuparnos por tonterías y a disfrutar de los nueves meses al máximo.

  2. No permitirnos elegir el parto que queremos: la experiencia de haber pasado por un parto anterior nos ayuda a saber qué queremos y qué no la próxima vez.

  1. No salimos corriendo al médico con el bebé ante el mínimo síntoma: ya tenemos más criterio para discernir qué es urgente y qué puede esperar al día siguiente.

  2. No llenamos la casa de trastos innecesarios ni de ropa que nunca usaremos: ya sabemos cuáles son los artículos para bebé que nos serán útiles y cuales no.

  3. No nos dejamos influenciar tan fácilmente por los comentarios de los demás.

  4. No nos liamos tanto con horarios, rutinas y cuidados: la experiencia nos ayuda a ser más organizados con el segundo y a comprender que si un día no se baña, no pasa nada.

  5. No los apresuramos a que den pasos para los que no están preparados: con el segundo controlamos mejor nuestra ansiedad.

¿Alguien se anima a ampliar la lista de errores aprendidos?

Temas
Comentarios cerrados
    • Con nuestro segundo hijo no cedemos a chantajes, sabemos distinguir un llanto "verdadero" de uno para llamar la atención.

      También seguimos un método definido a la hora de irse a dormir, que nos funciona muchísimo mejor, bastante pasamos con su hermana hasta los cuatro años!!!

    • Con el segundo hijo aprendes que los niños no chantajean, sino que piden lo que necesitan, aprendes que no hacen las cosas para molestar, que no hacen las cosas para probar hasta donde puede llegar tu paciencia. Todo lo que hacen es porque están aprendiendo y para ello necesitan el apoyo de sus papás, para sentirse seguros en cada nuevo aprendizaje. Saben que solos estarían indefensos, por eso te llaman, por eso piden insistentemente si es preciso que estés con ellos, porque tú, papá o mamá, eres su alimento, eres sus pies, sus piernas, sus ojos, sus manos, eres su abrigo y eres su protector. Necesitan de ti para aprender qué es lo que le rodea hasta que crezca y lo pueda investigar por si mism@. No lloran por la noche para engañarte, llora porque te necesita, porque tiene miedo y se siente inseguro, porque está enfermo y necesita atención, porque tiene hambre y necesita alimento.

      Si un niño llora porque tiene hambre, no tardas en darle su alimento. Si un niño llora porque tiene el pañal sucio, no tardas en cambiarlo. Si un niño llora porque tiene sueño, lo duermes. Si un niño llora porque está enfermo, lo cuidas. Si un niño llora porque necesita cariño y compañía, "te está tomando el pelo".

      Con el segundo aprendes que sí, que las madres tienen leche, sólo hay que tener paciencia.

      Con el segundo, si te lo propones, aprendes todo aquello que no aprendiste con el primero.

    Inicio
    ×

    Utilizamos cookies de terceros para generar estadísticas de audiencia y mostrar publicidad personalizada analizando tu navegación. Si sigues navegando estarás aceptando su uso. Más información