La autoestima es un concepto que hace alusión al amor propio; engloba todas aquellas actitudes, pensamientos y comportamientos dirigidos a uno mismo. Tiene que ver con el hecho de cuidarse, admirarse y respetarse.
El psicoterapeuta canadiense Nathaniel Branden describe en su libro Los seis pilares de la autoestima (1994) seis elementos que configuran la autoestima.
Estos elementos permiten la construcción de una autoestima sana, que pueden trabajarse tanto en niños como en adolescentes y adultos. En este artículo descubriremos cuáles son y cómo podemos potenciarlos en niños para fomentar así, una buena autoestima.
Finalmente, reflexionaremos sobre la importancia de cultivar una buena autoestima ya desde la infancia.
Los seis pilares de la autoestima y cómo trabajarlos en los niños
¿Cuáles son estos seis pilares que propone Branden? Vamos a describirlos y a ver cómo pueden trabajarse en los niños con pequeñas tareas o ejercicios.
1. Vivir de forma consciente
El primer pilar que propone Branden es el hecho de vivir de forma consciente. Es decir, vivir el presente, poniendo toda nuestra atención y conciencia en él.
"La verdadera generosidad para con el futuro consiste en entregarlo todo al presente".
-Albert Camus-
¿Cómo fomentar esta manera de vivir en los más pequeños? Podemos practicar con ellos a través de ejercicios sencillos de mindfulness, como por ejemplo: ponernos en una posición cómoda con ellos (por ejemplo, sentados), cerrar los ojos y focalizar nuestra atención en la respiración (sea como sea esta).
En el momento en el que la atención se desvíe a otras cosas (por ejemplo, a pensamientos diversos), deberemos redirigir la atención a la respiración, las veces que haga falta. Este ejercicio permite entrenar la atención para que esta se focalice donde nosotros deseemos; requiere entrenamiento pero con constancia, puede llegar a ayudarnos a focalizarnos en el momento actual.
2. Aceptación
La aceptación es otro de los pilares de la autoestima, un concepto que Branden liga a tres acciones concretas:
- La disposición a experimentar plenamente todo aquello que sentimos.
- Ponerse del lado de uno mismo (es decir, no pelear internamente; cuidar nuestro diálogo interno).
- Ser amigo de uno mismo y practicar la autocompasión; tratarnos con amor y respeto.
En los niños, podemos trabajar este pilar de la autoestima por ejemplo a través del dibujo, una herramienta muy útil que permite conocer también su mundo interno.
Podéis proponerle dibujarse a él mismo y que escriba, en un lado de la hoja, aquellas cosas que más le gustan de él, y en el otro lado, aquellas cosas que le gustaría mejorar o cambiar. En este punto es muy importante reforzar sus cualidades y también su honestidad.
3. Responsabilidad
La responsabilidad implica hacerse cargo de las propias acciones, sean cuales sean estas. En los niños, podemos ayudarles a potenciar este pilar de la autoestima a través de algunas tareas adaptadas a su edad.
Por ejemplo, podemos elaborar con ellos un pequeño calendario de las tareas semanales; no hace falta que sean todas tareas "de casa"; pueden ser también tareas "emocionales". Por ejemplo, revisar cómo me siento por la mañana.
4. Autoafirmación
El cuarto pilar de la autoestima propuesto por Branden es la autoafirmación. La autoafirmación se relaciona con al auto-respeto, e implica respetar nuestros propios deseos y valores. También conlleva el hecho de intentar valernos por nosotros mismos.
En niños, la autoafirmación puede trabajarse elaborando una lista con ellos sobre aquellas cosas que les definen. Por ejemplo: "me define el deporte, ya que soy un niño muy deportista".
Al lado de cada ejemplo, pueden también añadir pequeñas acciones relacionadas con el valor en concreto. Por ejemplo, en el valor del deporte, una acción podría ser "voy a fútbol dos días a la semana y eso me hace sentir bien".
5. Propósito
El propósito que propone Branden tiene que ver, en gran parte, con el sentido de nuestra vida. Este, a su vez, puede desgranarse en pequeños propósitos o metas personales; por ejemplo, metas que nos propongamos en nuestro día a día (que también pueden descubrir los más pequeños).
Y es que la autoestima se nutre de las metas y objetivos que nos proponemos, porque a través de ellos, ponemos en marcha acciones que nos definen y que, en cierto modo, nos conducen a la autorrealización personal.
En niños podemos ayudarles a encontrar sus pequeñas metas personales; no hace falta que sean "grandes cosas", sencillamente, cosas que les interese aprender, descubrir, mejorar... En este sentido, es una buena oportunidad para descubrir qué les motiva a nuestros hijos y para pasar tiempo con ellos disfrutando de esas actividades.
6. Integridad
Finalmente, el sexto pilar de la autoestima propuesto por Branden es la integridad. La integridad se define como la coherencia entre nuestros valores y nuestras acciones.
Según Branden, a mayor integridad, mayor autoestima. Por contra, el hecho de no ser coherentes con lo que hacemos y pensamos, puede debilitar nuestra autoestima. No es fácil ser íntegros a todas horas, y tampoco debemos exigirnos (y mucho menos exigirle a los niños) ser siempre íntegros. Pero sí podemos ayudarles a potenciar la coherencia con lo que hacen y piensan.
Así, en niños podemos acompañarles a descubrir si están poniendo en práctica su integridad hablando abiertamente con ellos sobre lo que piensan de ciertos temas. A través de ello, podremos conocer sus valores. Por ejemplo, podemos usar los libros o cuentos infantiles: leerlos juntos y reflexionar sobre las acciones de los personajes.
Una vez conocemos sus valores, podemos preguntarles: ¿en tu día a día, tú también actúas así? ¿Cómo actuarías en X situación?
La importancia de potenciar la autoestima en los niños
Hemos descubierto algunas formas de potenciar la autoestima en los más pequeños, aunque no son las únicas. Podemos cultivar su autoestima también reforzando sus acciones cotidianas, sus valores, sus emociones...
También, haciéndoles saber lo valiosos que son a través del amor, la escucha, el cariño... Y sobre todo, a través de nuestra manera de vincularnos con ellos (el apego en la infancia, concretamente un apego seguro, resulta esencial para su desarrollo físico y emocional).
De esta forma, es importante cultivar la autoestima en los niños porque una buena autoestima de adultos resulta imprescindible para sentirse bien con uno mismo, para actuar con coherencia, disfrutar de la soledad, ser más autónomo, establecer vínculos saludables con los demás, etc.
Fotos | Portada (freepik)