Durante el embarazo suceden muchos cambios en el cuerpo de la mujer, debido a las hormonas que comienzan a trabajar para gestar al bebé. Una de las cosas que se ven afectadas por dichos cambios, son los hábitos de sueño.
Conforme avanza el embarazo, el descanso de la madre va experimentando diversos cambios. Vamos a revisar lo que podemos esperar en cada trimestre en lo referido al sueño de la embarazada.
Primer trimestre
El cansancio generalizado y las ganas de dormir a todas horas es una de las molestias más típicas al inicio del embarazo. Esto se debe a los cambios físicos que tiene nuestro cuerpo en esta etapa.
Comienza a aumentar el volumen sanguíneo, por lo que el corazón y los órganos involucrados trabajan más de lo habitual. Además, en este trimestre se forman la placenta y los principales órganos del bebé, por lo que es normal que haya un mayor consumo de energía.
En esta etapa del embarazo sentirse cansada y somnolienta es lo esperado, y si a esto le sumamos el malestar por los vómitos y el estrés emocional, es lógico que el cuerpo pida descanso, por lo que es importante atender esta necesidad.
Segundo trimestre
Durante el segundo trimestre ya no nos sentimos tan cansadas y nuestro cuerpo, que ya se ha adaptado a todos los cambios que está experimentando, tiene un poco más de energía (en comparación con el primer trimestre).
Ahora, más que sentirnos cansadas o somnolientas por el trabajo que está realizando nuestro cuerpo, el sueño puede verse afectado por las molestias del segundo trimestre que pueden interrumpir nuestro descanso o despertarnos por las noches.
Por ejemplo, en este trimestre es normal que el sueño se vea afectado por por las molestias circulatorias, musculares como los calambres o digestivas, como la acidez e indigestión.
Al final del segundo trimestre, aparecerán otras tantas que pueden impedir que se tenga un sueño reparador, como el peso de la barriga que continúa creciendo y comprimiendo la vejiga, lo que ocasiona que se tengan despertares con mayor frecuencia para ir al baño.
Tercer trimestre
Cuando llegamos al tercer trimestre y etapa final del embarazo, el tamaño de la barriga, así como las preocupaciones al acercarse el momento del parto, puede afectar nuestra calidad de sueño. De hecho, la mayoría de las mujeres suelen padecer insomnio al llegar a este trimestre.
Las causas más habituales de insomnio durante esta etapa son el aumento de la frecuencia urinaria, el reflujo gastroesofágico, el síndrome de piernas inquietas, y los movimientos del bebé.
También, aumentan los dolores de espalda y otras molestias musculares, relacionadas con el incremento del tamaño del bebé y la barriga, lo que sin duda ocasiona dificultades para dormir en este tercer trimestre.
Consejos para un mejor descanso durante el embarazo
Dormir mal es perjudicial cualquier etapa de la vida, pero durante el embarazo el cansancio acumulado puede ser causa de algunos trastornos, como dolores de cabeza, o complicaciones graves como parto prematuro o diabetes gestacional. Por eso, el descanso en esta etapa es fundamental y sumamente importante.
Cada mujer es diferente y como hemos visto, son diversas las molestias que pueden aparecer en cada trimestre, pero compartimos algunos consejos generales para tener un mejor descando en el embarazo:
Nuestra primera recomendación es descansar siempre que se pueda. Cualquier ratito es bueno para dar una cabezadita o tomar una siesta: después de almuerzo o antes de cenar, e irse a dormir más temprano de lo habitual.
Cuando comience la necesidad de orinar con frecuencia, conviene ir al baño justo antes de acostarse, de modo que podamos dormir por periodos más prolongados.
Hay que procurar cenar al menos dos horas antes de ir a la cama, y hacer cenas ligeras y saludables, especialmente en el tercer trimestre, cuando aumentan los problemas digestivos como la acidez e indigestión.
Evita tomar café y otras bebidas con cafeína. Además de las complicaciones y riesgos que puede ocasionar su consumo en el embarazo, también puede afectar el sueño durante esta etapa, por lo que lo mejor será hacer lo posible por evitarlo.
"Desconecta" una hora antes de iniciar el descanso: deja el trabajo y apaga las pantallas. Procura realizar en esta hora actividades que te ayuden a relajarte, como leer, meditar, escuchar música suave o tomar un baño relajante.
Hacer ejercicio moderado por las tardes también puede ayudarnos, pues además de los beneficios para la salud de mamá y bebé, el cansancio favorece un sueño más profundo.
Cuando la barriga ha crecido, es dificil encontrar una posición cómoda para dormir, por lo que puedes apoyarte sobre cojines y almohadas para ayudarte a tener un mejor descanso.
Duerme sobre el lado izquierdo, especialmente durante el último trimestre de embarazo. De este modo evitamos la presión del peso del cuerpo sobre la vena cava materna, se favorece la irrigación de la sangre a la placenta y facilita la llegada de oxígeno y nutrientes al bebé.
Algunos de estos consejos pueden ser difíciles de seguir si ya tenemos un hijo o más de uno, pero como lo mencionamos, un buen descanso es esencial en esta etapa, por lo que habremos de hacer lo posible y buscar ayuda para que se nos facilite hacerlo.
Fotos | iStock
En Bebés y más | ¿Cuál es la mejor posición para dormir en el embarazo?, Insomnio en el embarazo: ¿por qué no puedo dormir?