Mientras que, en invierno, con el frío y la lluvia, lo que más nos apetece es el clásico plan sofá-peli-manta, cuando llega el calorcito nos echamos a la calle para disfrutar de una jornada en familia. El buen tiempo es sinónimo de más horas de luz solar y cualquier plan es perfecto para salir de la rutina del hogar: la montaña, la playa, un parque de atracciones, visitar a los abuelos… Pero pasar el día fuera de casa con niños equivale, en muchos casos, a ir muy cargado y a estresarse más de la cuenta.
¿Cómo conseguir que los peques aguanten toda la jornada? ¿Qué es imprescindible para una salida de ese tipo? En este post, encontraréis las claves para prepararos para pasar un magnífico día fuera de casa.
El plan ideal
El plan ideal para pasar un buen día “por ahí” no existe. Todo dependerá de vuestros gustos, de vuestras inquietudes, de la edad de vuestros hijos… Lo que está claro es que opciones hay muchísimas, tan solo tenéis que deteneros a pensar qué os apetece hacer el próximo fin de semana y organizarlo.
De escapada al campo, una jornada divertida en la playa, un subidón de adrenalina en un parque acuático o de atracciones, de ruta cultural por algún pueblo con encanto o un itinerario gastronómico por vuestra provincia son solo algunas propuestas dirigidas a un público familiar que podéis encontrar en casi cualquier rincón de nuestro país. Pero hay muchos más planes ideales para hacer con niños, algunos de los cuales se agendan en páginas webs especializadas que incluso los clasifican por edades, temáticas y zonas.
Cuestión de actitud
Para que una escapada familiar sea perfecta lo más importante es la actitud. A veces, los padres solemos pensar que los niños no aguantarán todo el día fuera de casa, que tendrán un comportamiento negativo y que será un fiasco de día. Os proponemos que cambiéis el chip y os lancéis a probarlo: seguro que vuestros hijos os sorprenden. Eso sí, vosotros tenéis que ser los primeros con una buena actitud y mucha paciencia, ya que los niños son niños y puede ser que, en algún momento u otro, hagan de las suyas.
Si es la primera vez que salís con los peques, empezad por planes cerca de casa y de medio día solamente. A ver qué tal llevan eso de estar fuera de su ambiente. A partir de ahí, podéis ir probando cosas nuevas, alargando la jornada e incorporando nuevas actividades a la planificación de la agenda familiar.
Esto sí, esto no
Para pasar un día fuera de casa es importante que cojamos varios enseres que nos facilitarán la jornada. Pero no son tantos como creéis, así que si lo que os da pereza es ir cargados, ¡para nada! Se puede salir de casa con lo justo y necesario.
Lo más básico de vuestra lista de imprescindibles será la muda de recambio, por si los niños se manchan, y pañales y toallitas si aún los llevan. Si vuestra escapada es al aire libre, no os olvidéis de la crema solar, el repelente para los mosquitos, la gorra y unas gafas de sol. Además, os sugerimos llevar agua y algún picoteo saludable, como palitos de pan o fruta, por si les da hambre en el momento menos oportuno. Como veis, se trata simplemente de algunas cosas que, si lleváis en una mochila, a penas os molestarán.
A partir de ahí, podéis ir añadiendo cosas en función del plan. Si vais a la playa, piscina o parque acuático, no debéis olvidar el bañador, las chanclas y una buena sombrilla. Si, en cambio, os decantáis por la montaña, deberéis coger un calzado para hacer senderismo, así como ropa y accesorios apropiados para ello, como una brújula o un mapa de caminos y senderos.
Algunos útiles que, aunque no son imprescindibles, os recomendamos llevar son algún juguete o libro que le guste a vuestro hijo y que servirá para que esté entretenido en momentos diversos. Si vais en coche, además, podéis coger su música favorita para que el viaje sea lo más ameno posible.
Mantener las rutinas
Para los niños, las rutinas y los horarios son muy importantes, especialmente si son pequeños. Si están acostumbrados a comer a una hora en concreto, intentad mantener esa rutina en la medida de lo posible. Podéis llevaros alguna fiambrera con su comida habitual, pero si queréis ahorraros el trajín de ir transportando comida durante el viaje, algo que con el calor no es muy recomendable, pensad que la mayoría de restaurantes os ofrecerán comida adecuada para los peques hecha al momento. Hoy en día los bares y restaurantes cuentan con tronas infantiles pero, si lo preferís, podéis meter en el maletero del coche una trona portátil que apenas pesa ni ocupa espacio.
Otra de las rutinas básicas de los niños es la siesta. Si vuestro hijo está habituado a dormir una o dos siestas al día, tened en cuenta esta necesidad e intentad no saltaros su horario. Que estén bien descansados influirá mucho en su comportamiento durante la jornada y, además, facilitará que tengan un sueño plácido también por la noche.
Si sus horas de siesta coinciden con el desplazamiento en coche, podéis aprovechar para que duerman en ese momento. Si no, una solución es llevar una silla de paseo compacta, es decir, que pueda plegarse fácilmente ocupando poco espacio, pero que, a la vez, permita reclinarse completamente, para que los niños puedan tumbarse a descansar cuando lo necesiten. La sillita es una muy buena opción para las siestas puntuales, ya que os servirá también para cuando estéis en casa de otros familiares o amigos.
La silla Echo de Chicco cumple con ambas funciones, siendo un complemento ideal para pasar el día fuera de casa. Cuando los peques se tumben en ella podréis reclinar el respaldo en 5 posiciones, garantizando así su comodidad y descanso.
Esperamos que los sencillos consejos de este post os animen a salir de casa y a organizar actividades diversas para disfrutar en familia. Y si tenéis algún consejo o truquito para pasar un día estupendo fuera de casa os animamos a que lo compartáis en los comentarios.
En Momentos Chicco
Fotos|iStock: Nadezhda1906 / encrier / Nadezhda1906