Los primeros días con el bebé son días de conocerle, de examinarle, de saber cómo es su cuerpo, sus formas, de buscar lo que nos parece normal y lo que nos parece raro o que desconocíamos. Para tenerlo claro, hace unos meses os ofrecimos una entrada en que explicábamos cómo era el aspecto normal de los bebés al nacer, porque muchas veces nos llama la atención o nos asustan cosas que son perfectamente normales.
Algo de lo que no hablé en esa entrada y que algunos padres me preguntan es lo relacionado con el color de las manos y los pies, pues algunos bebés los tienen un poco azulados. Además, está el tema de la temperatura, y es que parece que por más ropa que le pongas al bebé, siempre tienen las manos y los pies fríos. A continuación os explicamos el porqué.
Inmadurez capilar
El colorcito azulado o violáceo de las manos y los pies en los primeros días responde a una inmadurez de los capilares. Algo así como si todavía no fueran capaces de llevar sangre suficiente a la superficie de sus partes más distales (las manos y los pies) y por eso no tienen aún el color rosadito que esperamos.
Pasados unos días, cuando todo funcione mejor, cuando llegue más circulación a las zonas más superficiales, tanto las manos como los pies se verán del color habitual.
¿Las manos y los pies fríos?
Sobre el tema de la temperatura de las manos y los pies ya hemos hablado en otras ocasiones. Es normal y es un poco por lo mismo. Como la circulación en las zonas más lejanas al tórax no es tan eficaz y como, de hecho, no usan las manos y los pies para nada aún, la temperatura es más fría que el resto del cuerpo.
Esto hace que las abuelas se pongan nerviosas y que piensen que llevas al niño desabrigado, pidiéndote que le pongas otra capa o poniéndoles directamente una manta encima, cuando probablemente no la necesitan. A este respecto ya os dijimos un día que si os veis en esa situación, no pongáis otro jersey, sino unos calcetines más gordos.
¿Que no os creéis lo de la temperatura? Pues mirad la foto que os pongo a continuación, que ya os mostré hace más de un año y lo veréis claro. Hecha con una cámara térmica, se ve claramente que las manos y los pies de un bebé tienen una temperatura mucho menor que el resto del cuerpo.
Por contra, las más calientes son la axila y el cuello y por eso siempre se les dice a las madres que, para saber si su bebé tiene frío o calor, le toque por detrás del cuello, por la nuca, entrando un poco hacia la espalda. Ahí es donde sabremos si está frío, caliente o incluso sudando (se aconseja imprimir la foto en color, tamaño póster, para regalar a las abuelas y evitar que las mantas ayuden al bebé a hacer la fotosíntesis o algo peor).
Fotos | Flickr, Jorge Martin de Termografiarte
En Bebés y más | Cómo abrigar correctamente a bebés y niños, El bebé descubre sus manos, Bebés que sudan