Se habían recibido muchas peticiones de mujeres que deseaban someterse a una fecundación in vitro tras el fallecimiento de su marido, pero la ley y la falta de autorización judicial lo habían impedido hasta hace muy poco. El Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) ha realizado la primera fecundación in vitro a una mujer valenciana que perdió a su marido hace casi un año en un accidente de tráfico.
Tiempo atrás, el esposo firmó un documento de voluntades anticipadas (testamento vital) en el que acordaba y autorizaba que si fallecía, se le extraería semen para que su mujer pudiera tener un hijo en el futuro. Ante tal documento y la nueva ley entró en vigor en mayo de 2006 que regula las técnicas de reproducción asistida, y que estima la posibilidad de hacer un testamento vital sobre el consentimiento de fecundación, el embarazo ya es efectivo y ha superado el primer trimestre. Sin el documento de autorización de fecundación in vitro post mortem por parte del varón, el único que puede autorizar la inseminación es un juez, cosa que no había sucedido nunca en nuestro país, según afirman las fuentes.
El plazo de uso del semen almacenado estaba a punto de cumplir, no puede superar los doce meses tras el fallecimiento, así que la mujer tuvo que tomar la decisión de quedar embarazada y tiene en su vientre a su bebé, el que seguramente le ayudará a mitigar el dolor por la pérdida de su joven marido.
El bebé contará con los efectos legales que derivan de cualquier matrimonio, contará con el apellido de su padre y será considerado hijo legítimo.
Vía | Tele 5 Más información | 20 Minutos