En nuestra familia ni mamá manda ni papá es solo un espectador: la crianza es de los dos
En esta época es muy común ver que son cada vez más los padres que se comprometen en la crianza de los hijos. Y esto es algo que sin duda es muy bueno pues está comprobado que la cercanía del padre es beneficiosa en el desarrollo de los niños.
Sin embargo, aunque dentro del núcleo familiar papá se encuentre muy activo en el cuidado y educación de los hijos, aún es muy común que las personas asuman que es la madre quien se encarga de ellos de manera exclusiva y reduzcan el papel del padre a uno secundario. Por eso hoy me gustaría recordarles algo: la crianza es de los dos.
Los hijos son de mamá y papá
Esto es más que claro, pero a veces pareciera que a algunas personas se les olvida y pareciera que los hijos son sólo de mamá. En nuestra pequeña familia, Lucía es de los dos. Ambos decidimos tenerla, ambos estuvimos esperándola y ambos estamos a cargo de su cuidado. Ella es responsabilidad de papá y mamá por igual.
Anteriormente la crianza y cuidado de los hijos recaía solo en las madres, pero los tiempos, las costumbres y las formas de pensar cambian y la relación con los hijos no es la excepción. Actualmente somos millones de familias las que tomamos la decisión de que todo lo relacionado con el hogar y los hijos es algo que se hace en equipo. En nuestra casa, por ejemplo, hemos decidido que nuestra labor como padres se divide en parte iguales. Porque los hijos son de los dos.
Ni mamá manda ni papá es solo un espectador
Es común y bastante normal que siempre se acuda a la mamá cuando se trata de hablar de algo acerca de los hijos. Aunque las cosas sean muy distintas a hace 50 años, por costumbre quizás, continuamos dirigiéndonos a la mamá y no al papá.
Esto es algo que pasa especialmente en reuniones familiares o en fiestas a las que acudimos los tres: cuando alguien quiere preguntar sobre Lucía o hacer un comentario, se dirige específicamente a mí. Es una situación que no me molesta en lo absoluto, pero sin que se den cuenta, continúan reduciendo a su padre a un papel secundario.
Quizás piensen: "vamos, que no es para tanto", pero la realidad es que al hacer esto, sigue vigente esa creencia de que papá es como una niñera o un mero espectador, que sabe poco o nada sobre el cuidado de los hijos.
Pero papá sabe, y sabe muchísimo. En casa, desde que nació Lucía, ambos nos levantábamos en la noche a atenderla, claro que como mamá en ese momento era más activa por la lactancia, pero el cambio de pañales, los baños, las siestas, todo lo hacíamos los dos. Nunca hubo un "anda, ahora te toca a ti" porque ambos sabíamos que éramos un equipo y siempre estuvimos al pie del cañón.
Con el paso de los años, mi esposo es igual de experto en "Lucía" como yo. Ambos conocemos sus gustos, sus fuerzas, sus debilidades y sus necesidades. Sabemos reconocer sus expresiones y somos capaces de identificar fácilmente cuando algo no le gusta o le molesta. Y eso es gracias a que siempre fuimos igual de activos en su cuidado y crianza, situación que actualmente viven muchas familias.
Desde luego, cada familia es distinta
Ahora, obviamente el ritmo de vida de cada familia es distinto y lo que nos funcione a nosotros quizás no le funcione a las demás, pero lo que debemos tener presente, es que la implicación de los padres es clave en el desarrollo de los niños. Con el paso del tiempo hemos logrado encontrar un equilibrio para que ella pase tiempo a solas con ambos, además del tiempo que pasamos juntos los tres.
En nuestro caso se podría decir que seguimos la modalidad "tradicional" de que papá trabaja fuera de casa, pero cuando llega es el momento en que trabajamos como equipo y estamos ambos con ella. A veces yo me voy a un café para trabajar algunas horas, mientras papá se queda con ella en casa. Es algo que nos beneficia a todos, porque por un lado ellos pasan tiempo juntos y yo puedo enfocarme al 100% en mi trabajo sin todos los pendientes de la casa.
Entiendo que hay familias y personas que aún consideran a mamá como la principal responsable del cuidado de los hijos, pero hoy en día son cada vez más los padres que se involucran y que justamente desean que se les deje de ver como una niñera. Así que dejemos de hacerlo a un lado, pues la crianza es de los dos y es un trabajo en equipo.
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