Al contrario de lo que muchos padres puedan pensar el deporte no es contraproducente en niños que padecen asma.
Es más, según las conclusiones del último Congreso de la Sociedad Española de Neumología, la práctica deportiva es saludable para los niños asmáticos, salvo en casos de crisis agudas.
La mayoría de los padres impiden que sus hijos asmáticos realicen deporte o cualquier otra actividad que pueda poner a prueba su capacidad respiratoria. Pero los médicos aseguran que “un deporte reglado y apto contribuye a favorecer las resistencia física y la capacidad respiratoria del niño, elementos que aunque no sean determinantes como factores de prevención sin duda actúan como aliados frente a la enfermedad', añade el comunicado.
Un buen consejo para tratar una enfermedad que se extiende como una mancha de aceite entre la población infantil.
Vía | Terra