El dolor es una de nuestras mayores preocupaciones como padres, desde que el bebé nace y no nos puede expresar con palabras si le duele algo hasta que crecen y a pesar de explicarnos dónde les hace daño no podemos ayudarles. Tal vez la solución al dolor, en algunos casos, sea tan sencilla como echarle imaginación.
Un equipo de científicos de las universidades de Duke y Carolina del Norte en Estados Unidos demostraron que el uso de la imaginación alivia las molestias gastrointestinales funcionales (las ocasionadas sin que existan evidencias de que hay un trastorno) de los más pequeños.
En esta técnica, denominada "de imaginación guiada", se utiliza una grabación de una guía verbal para que los pacientes tengan una experiencia específica determinada con efectos beneficiosos sobre su conducta.
Un ejemplo que se destaca en el estudio muestra cómo el cuerpo puede responder a lo que la mente imagina. ¿No habéis salivado alguna vez pensando en alguna comida?
El trabajo se llevó a cabo gracias a la participación de 34 niños de entre 6 y 15 años a los que se les indicó el tratamiento convencional para las molestias gastrointestinales durante dos meses. No obstante, 19 de ellos siguieron durante ocho semanas con la técnica de la imaginación guiada.
Los resultados muestran que la técnica es entre dos y tres veces más eficaz a la hora de reducir el dolor que los cuidados clásicos, aparte de que a los niños les encantaba la experiencia (y ahí radica su éxito, a mi parecer).
Mientras que un 73% de los niños asignados a la nueva terapia reconoció que sus dolores de barriga se habían reducido a la mitad, esta cifra sólo alcanzó al 26% de los que siguieron la terapia convencional.
Además, los beneficios de esta técnica parecen alargarse en el tiempo, y podría ser beneficiosa a largo plazo, pues los efectos positivos persistieron en el 62% de los menores al medio año de haberse realizado el tratamiento.
Sin duda es una noticia muy positiva de la que esperamos seguir obteniendo más datos, pues, aparte de que una gran parte de las consultas pediátricas a partir de los 5 años se deben a molestias gastrointestinales recurrentes, se trata de una técnica fácil de aplicar en casa y sin apenas coste.
Antes de iniciar este tratamiento se enseñaba a los padres y a los hijos en la clínica su manejo. Pero imagino que algo bastante sencillo, al estilo de "Cierra los ojos e imagina...". Un ejercicio de relajación.
Tan solo con que los niños escucharan con frecuencia los CDs, los síntomas de dolor gastrointestinal mejoraban. Imaginación, relajación y atención, unas buenas terapias.
Vía | Sociedad Española del Dolor Foto | Alyssa L. Miller en Flickr En Bebés y más | Le duele la barriga, Calmar el dolor del recién nacido