Cómo ha cambiado el día de Reyes en tan sólo 30 años

Cómo ha cambiado el día de Reyes en tan sólo 30 años
9 comentarios

Han pasado escasos días desde el día de Reyes, pero ya podemos hacer balance de lo sucedido. El siempre incisivo Faro publicó una viñeta el mismo día 6 en la que nos enseñaba cómo ha cambiado el día de Reyes en tan sólo 30 años y creo que refleja perfectamente la realidad actual.

Hace poco menos de 30 años era yo uno de los niños que corría con la pelota por el parque, que salía con los amigos a jugar o que me quedaba después del colegio los viernes en el parque de al lado del colegio a jugar a fútbol hasta que anochecía.

Pero ciertamente los tiempos han cambiado, tanto para los niños como para los adultos. Ya no llamamos al fijo para dejar el recado "dile que me llame a la noche cuando llegue", sino que llamamos por móvil, enviamos un SMS o directamente un WhatsApp.

La Gameboy ha dejado paso a la Nintendo DS y la 3DS, a la PSP o a la PS Vita y el teléfono, incluso el móvil, se ha convertido en un centro multimedia que nos sirve de agenda, de MP3, para jugar, ver películas o incluso leer libros.

De igual modo que todo esto ha llegado al mundo de los adultos, los cambios los viven también nuestros hijos, porque ellos son, en cierto modo, el reflejo de la sociedad, el espejo de nuestras costumbres. Los adultos somos cada vez más sedentarios, estamos cada vez más estresados y tenemos cada vez menos tiempo, los niños, por ende, viven la misma realidad.

Me confieso persona tecnófila, pero sin llegar a la obsesión (aunque los que viven obsesionados por algo tampoco suelen confesarlo), y eso hace que en mi casa haya bastantes pantallas y artilugios de "Tic, Tic, Tic", como en la viñeta de Faro.

Mis hijos también hacen uso de ellas y, aunque hay gente que se escandaliza cuando les digo que mis hijos hace ya tres años que tienen Nintendo DS (con 6 años el mayor y 3 el pequeño), vivo tranquilo porque una cosa es tenerla y jugar de vez en cuando y otra muy diferente obcecarse con ella y no soltarla ni en la calle.

Como he dicho alguna vez, alternativas a las consolas y las pantallas hay cientos, sólo hace falta alguien que proponga (papá o mamá) y si hace falta disponga, y los niños suelen acceder, porque prefieren jugar con nosotros que solos. Ahora bien, si nadie propone, pues tendrán que buscar con qué jugar... a veces serán sus muñecos o muñecas, a veces serán disfraces, a veces serán otros juegos y a veces serán los "Tic, Tic, Tic, Tec, Tec, Tec", y más si papá o mamá también tienen móviles donde leer el correo, jugar, enviar mensajes, etc.

No sé cómo lo hacéis vosotros, pero sí os puedo decir cómo lo hacemos nosotros: en casa hay y seguirá habiendo pantallas. Creo que es el presente y sobretodo el futuro, y a mí personalmente me gusta. Sin embargo, es una cosa más y debe ser así, una alternativa, una herramienta que posibilita el juego (y no la única herramienta), y por eso siguen entrando libros, juguetes, disfraces, muñecos y por eso papá y mamá siguen compartiendo juegos y tiempo con ellos. Y sobretodo, sobretodo, las consolas no salen de casa.

Ahora contadme, ¿qué sensaciones os ha provocado la viñeta de Faro?

Imagen | Faro En Bebés y más | Videojuegos: con moderación y en familia, Los Reyes Magos y Santa Claus traen tecnología a los niños, ¿Los videojuegos ayudan o perjudican a los niños?

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    • interesante

      La sensación que me produce la viñeta de faro es que el tiempo pasa muy rápido: entre 1982 y 2012 no han pasado 20 años, sino 30.

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    • Avatar de 20588 Respondiendo a 20588

      Jo, ya lo he cambiado... menuda gambada. Está claro que para matemático no iba. De todas maneras tienes razón, qué rápido pasa el tiempo, por Dios!

    • La sensación es que es la pura realidad. Es lo que está pasando hoy en día. Nos estamos adaptando a los nuevos cambios. Otra cosa es que cada familia determinará cada momento que se puede utilizar y según las edades, la maquinita o no.

    • La pura realidad... Aunque evitable si como dices las consolas no salieran de casa (excepto para un viaje largo en coche por ejemplo). El problema es también sincronizar a los niños para que salgan a jugar a la calle. Mi marido y yo nos planteamos mudarnos a una urbanización con zonas comunes para que nuestros hijos jueguen con otros niños. Pero nos frena que vemos que salen poco a jugar a los patios, casi exclusivamente en verano si hay piscina y aún así se arremolinan en las consolas. Yo recuerdo jugar al rescate o a lo que fuera y subir a mi casa sudando a por un vaso de agua. Ahora es raro ver niños sin aliento de tanto jugar y me da penilla. No creo que sea bueno para la salud jugar sin moverse apenas y no previene la obesidad precisamente. También creo que si los niños han jugado con la consola en casa están deseando salir y jugar a otra cosa. Por lo menos al mio le pasa, que tiene consola en casa "a demanda" y juega con ella 2 ó 3 ratos de 15 minutos. Ellos mismos se regulan, jejeje.

    • Es una pena, la verdad, con lo bonito que era jugar con las muñecas. Yo estuve jugando con las Barbies hasta bien mayor, y ahora para cuando tienen la edad recomendada ya no les interesa. Y yo reconozco que me encantan las maquinitas, pero hay que poner límites. Aunque no se si sería contraproducente, porque si por ejemplo le dejas jugar únicamente un rato el domingo, por poner un ejemplo, no lo verán como un premio y les gustará todavía mas? Mi hija tiene dos años y le dejamos jugar de vez en cuando con el ipad a hacer puzzles o a pintar, y es curioso porque no le gusta nada hacer puzzles de los de verdad y pintando en papel se aburre enseguida. En lo que estoy totalmente de acuerdo es en que no salen de casa, porque a veces vas a un restaurante y ves al niño comiendo y con la consola. Me parece muy triste.

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    • Avatar de virginiag Respondiendo a virginiag

      Yo no pondría límites por eso mismo... cuando prohíbes una cosa ésta se hace más querida, más deseada, más especial.

      Yo lo que haría, si veo que mi hijo pasa mucho rato con una consola es ofrecer alternativas: "vamos a jugar a...". Suele funcionar casi siempre, porque como digo les gusta compartir el tiempo con nosotros. Es una cuestión de imaginación y de querer y poder pasar tiempo con ellos para que no se ensimismen en su pantalla.

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    • Pues eso yo creo que depende mucho de cada niñ@. El mío mayor particularmente se alimentaria del aire si pudiera y no haría otra cosa que saltar de la Wii al ordenador y de ahi a la DS, pasando por el movil o el iPad, cualquier cosa que tenga pantalla le sirve :( Y no es percepción mía, que he pasado por ejemplo un fin de semana en casa de un amigo y el niño invitando le a montar en bici o lo que sea y el mío dale que te pego a la pantalla, asi que si, a ve es hay que poner limites, creo yo, igual que jo le dejo comerse un kilo de caramelos, no le dejo pasar cinco horas delante de la pantalla...

      Ah, y los reyes en casa han dejado un video juego, unos patines y un patinete a cada uno ;)

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    • Avatar de maria.carrasco.casti Respondiendo a maria.carrasco.casti

      No sé María, quizás el amigo tenía un juego que él no conocía y le fascinaba... lógico entonces que no quisiera despegar de la pantalla. Un tiempo con el juego hasta que lo exprime y buscan alternativas.

      Yo más que decir que depende de cada niño diría que depende de lo que le ofrezcas... entre un juego nuevo y la bici, pues quizás muchos niños digan "juego nuevo", entre juego usado que me sé de memoria y bici, pues quizás la mayoría digan bici. Siempre habrá alguno que odie la bici que prefiera el juego usado, entonces habrá que buscar otra alternativa que le guste más que la bici.

      Como digo, no creo que haya que limitar en plan "deja la consola", sino más bien ofrecer cosas variadas y estimulantes.

    • Pues en nuestro caso no somos usuarios de consolas así que no tenemos ninguna en casa. Tenemos un niño de 1 añito, y espero que no lo convirtamos en el rarito de la clase. Supongo que siempre podrá jugar a consolas con sus amigos, sus primos, etc.

      A mi de pequeña me gustaban los lápices de colores, las ceras, la plastilina, las piezas de construcción, las muñecas, los puzzles de verdad (los que tienes que clasificar, tocar, girar, ...), saltar a la goma, los cromos, las cartas, los juegos de mesa,... Creo que no ha cambiado tanto la cosa como aparenta en la viñeta, las wii, DS, y demás artilugios son añadidos, pero no conozco ningún niño que no tenga plastilina en su casa. Hablo de niños, a partir de cierta edad ya es diferente, pero siempre ha sido así, no?

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