Algo que me parece impensable y muy arriesgado es que un niño pequeño se quede solo en casa. Sin embargo, sucede a menudo, tal y como se desprende de un estudio elaborado por la Fundación Mapfre y la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria.
El informe, titulado “Accidentes de la población infantil española”, nos deja el dato de que el 9,1 % de los menores de 12 años se quedan solos en casa en algún momento y de estos, el 5% tienen menos de cuatro años. Hasta bebés de menos de un año se quedan solos en casa.
Una práctica realmente peligrosa que propicia que se produzcan más accidentes infantiles y que creo que hace años era mas frecuente. Mis padres me cuentan que ellos y unos vecinos nos dejaban durmiendo en casa para ir a tomar algo al bar de al lado. De más mayorcita, recuerdo esta situación (¡y ni moverme de la cama!).
Hoy en día, me parece más raro que se deje a los niños pequeños solos en casa, todos conocemos historias de algún desastre ocurrido en esta situación. El hogar es peligroso para los pequeños, hay enchufes, balcones, ventanas, grifos, escalones, muebles que se convierten en montañas... Todo puede resultar potencialmente peligroso junto a un niño sin supervisión.
No obstante, las leyes en España no establecen una edad mínima a partir de la cual se pueden quedar los niños solos en casa. El Código Penal habla de que no se pueden dejar "en situación de desamparo".
Pero, ¿no es esto lo que hacemos si dejamos a un bebé o niño pequeño solo? Ellos no son capaces de reaccionar ante cualquier imprevisto, no pueden cuidar de sí mismos. Necesitan nuestra protección, nuestro amparo. Me resulta incomprensible que niños menores de cuatro años, incluso bebés, estén solos en casa.
Ni siquiera durmiendo, puede haber muchas razones para que se despierten y no comprendan qué ha pasado. Incluso aunque no suceda ninguna desgracia, el miedo que pasan los pequeños me parece suficiente motivo para no correr riesgos...
Es como el tema de dejar a los niños solos en el coche, del que os hemos hablado a menudo. Aunque en este caso los riesgos son más evidentes (y ahora que llega el calor, especialmente). Sea en el coche o en casa,
El informe del que se extraen estas cifras de niños solos en casa se elaboró a través de los más de 1700 cuestionarios que 204 pediatras hicieron a familias de niños hasta 14 años que tuvieron al menos un accidente (exceptuando accidentes de tráfico) en el último año, y volveremos sobre él porque se desprenden otros datos interesantes.
Hoy, nos ha servido para reflexionar sobre si dejaríamos o no a nuestros hijos pequeños solos en casa, con el riesgo que ello conlleva. Yo, no me atrevo, ni me lo he planteado. Hasta para subir a la terraza un minuto, me acompañan siempre. Veremos en qué momento pienso que podrían quedarse solas, creo que tendrán que pasar bastantes años...
Foto | Thinkstock
Más información | Fundación Mapfre
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