Hace dos días se conoció un estudio desarrollado recientemente por la Universidad Politécnica de Valencia, que propone registrar la edad de los menores que compren un teléfono móvil. Los investigadores responsables del informe, proponen que las operadoras de telefonía móvil soliciten el año de nacimiento de los usuarios menores de edad, así se podría comprobar la edad cuándo estos acceden a los servicios multimedia.
Ante la imposibilidad de tener un conocimiento real de la edad del usuario cuando este solicita un determinado servicio a través de la red, la medida propuesta evitaría ‘falsificaciones’ puesto que son los padres los que compran el dispositivo.
¿Crees que es necesario conocer la edad de los niños para adecuar los contenidos a ofrecer?
Todos sabemos que si el chico o la chica desean acceder a un servicio que le pregunta la edad, y es necesario ser mayor para ser autorizado, es fácil falsear los datos. Y por otra parte doy fe (teniendo en cuenta las múltiples conversaciones con padres de niños de todas las edades) de que en más de una ocasión, hay pequeños que visualizan contenidos que a muchos de nosotros nos harían sonrojar. Lo mismo pasa con las aplicaciones para jugar: no todas son aptas para todas las edades.
Gran parte de las compañías que operan en nuestro país han suscrito un código de autorregulación de la AESAM, que las vincula para apoyar el acceso responsable a los contenidos, aunque los investigadores de la UPV lo consideran insuficiente (es poso específico teniendo en cuenta las edades de los menores).
Bloquear sitios inapropiados y superar nuestras carencias
El estudio del que os hablamos ha sido publicado por la revista Quality & Quantity, siendo María de Miguel la coordinadora del equipo investigador: un grupo de expertos que propone bloquear los contenidos no aptos, para lo cual debería existir una normativa a adoptar por las operadoras.
El trabajo se realizó mediante encuestas que se habían remitido a agencias gubernamentales, asociaciones de protección del menor, y compañías telefónicas. Pero al mismo tiempo se ha pedido al gobierno español la formación a las familias, y la concienciación sobre un buen uso del teléfono móvil
Si alguien aún no se ha dado cuenta, los niños no sólo acceden a la red a través del portátil de casa o en la Biblioteca, sin embargo el uso de smartphones implica que o las familias nos preocupamos por informarnos y proteger a los niños (mediante la comunicación o las medidas físicas), o perdemos totalmente el control de cómo usan el dispositivo.
El equipo de la UPV también hace un llamamiento a las redes sociales en internet, puesto que (y a pesar de que) se producen ilegalidades en el acceso a ellas (¿sabéis la cantidad de menores de 14 años que se mueven en Tuenti o Facebook?), son quienes tienen el poder de – por ejemplo – cerrar perfiles por defecto, o educar desde sus espacios a los pequeños, para que aprendan a moverse con seguridad.
¿Una clasificación por edades para los contenidos en el teléfono móvil?
Los expertos recomiendan la misma que en los vídeo juegos (3, 7 , 12, 16 y mayores de 18 años). También recomienda estudiar la posibilidad de que los menores no puedan acceder a determinados contenidos (fotografías, videos, compras, concursos, determinadas redes sociales). Se invita a los operadores a implantar otros sistemas de gestión diferentes del control parental, que puede resultar complicado en dispositivos móviles.
¿Ha mejorado la seguridad de los niños en la utilización de Internet?
Hace tres años, el equipo coordinado por de Miguel, ya afirmaba que ‘los medios tecnológicos actuales no son suficientes para proteger a los menores de edad’. El hecho del impulso de la Unión Europea hacia la autorregulación, no quiere decir que estos servicios estén libres de riesgos.
Todo el mundo señala a los padres como responsables de la protección, y sin embargo también debemos entender que las empresas de servicios a móviles también tienen (y mucha) responsabilidad en el tema.
Imagen | Candace Nast
Vía | Abc
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